Dos policías municipales del Sector 1 – el mismo sector al que pertenecían el policía violador y sus dos compañeros acusados de cohecho – fueron aprehendidos por la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía General del Estado (FGE) presumiblemente por el delito de extorsión.

Hasta el momento, no existía un reporte oficial de la detención, pero fuentes policiales indicaron que la investigación en contra de los uniformados tiene que ver con actos de corrupción, concretamente habrían solicitado dinero a unas personas a cambio de no proceder legalmente.

En específico, se mencionó que los dos policías habrían asegurado una camioneta la cual desaparecieron y no remitieron ante el Ministerio Público, a cambio de no proceder habrían solicitado dinero y fueron detenidos cuando pretendían cobrar la extorsión.

Los dos policías fueron detenidos en la zona de Xonaca, según indicaron fuentes ciudadanas y después llevados a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado para su puesta a disposición.

Ni la Fiscalía, ni la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSTM) habían emitido alguna información al respecto.

Fuentes policiales de la SSPTM indicaron que se presume que el jefe directo de los detenidos estaba al tanto de los actos ilegales, pero los encubría.

Cabe señalar que sería el segundo escándalo en que se ve inmersa la corporación a cargo de María Lourdes Rosales Martínez, en menos de dos semanas. El primer caso de escándalo es el del policía violador y sus compañeros acusados de cohecho y encubrimiento, y el hecho de que el presunto violador sea hijastro de su chofer y "gente de confianza" Pedro F., al cual la secretaria le tolera todos los actos escandalosos en los que se ha visto relacionado. El segundo es el tema de la detención de estos dos policías extorsionadores.