La convivencia de las personas con los animales en su día a día puede ser una grata prueba para asegurar el por qué algunos los consideran como los mejores amigos. Esto debido al gran beneficio, y sobre todo, apoyo que estos amigos logran hacer en la vida humana. 

No podemos negar que desde una enfermedad hasta en algún desastre natural, los compañeros de cuatro patas están a la orden para poder brindar el apoyo. Sin embargo, en los últimos tiempos con la tecnología hemos podido apreciar que animales como los delfines son parte fundamental para algunos tratamientos terapéuticos humanos.  

Es por eso que sin importar la especie, son considerados salvavidas y podemos estar agradecidos con ellos por esa labor tan magnífica que, sin esperar algo a cambio, lo hacen de corazón. 

Si pensamos en algún animal que no dudaría en brindar su pata, es el mejor amigo del hombre. El perro ha demostrado ser, no sólo fiel, sino un superhéroe cuando se le necesita. Es por ello que tiene la insignia de salvavidas. Desde ser guía para alguien que no puede ver o poder calmar a una persona con epilepsia, incluso rescatar humanos en algún terremoto. El canino se ha vuelto parte de la vida de una persona y merece gran admiración de todos por su labor altruista.  

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¿Recuerdas a Frida? Ella es un claro ejemplo de los miles de perros que arriesgan su vida por los demás. Frida estuvo en el ojo público debido al terremoto de septiembre de 2017 en México. Cuando se encontraba activa acumuló 53 localizaciones de personas con vida, lo que le valió una estatua en Puebla.   

Así como Frida, hay perros que son vitales para la salud de las personas, ya sea para calmarlos por algún ataque como ansiedad, estrés o incluso la epilepsia, así como algunos trabajan a la par con los médicos para visitar a niños con cáncer o enfermedades terminales que necesitan un poco de luz y alegría.  

Pero no solamente los peludos han marcado huella en el área de apoyo. Desde hace muchos años se conoce que la equinoterapia es un programa de rehabilitación que ha ayudado a hacer un cambio para las personas con alguna discapacidad. 

Esta práctica se remonta desde 1917, año en el que el fisioterapeuta Olive Sands llevó sus caballos al Hospital de Oxford para colaborar en la rehabilitación de los soldados tullidos en la 1º Guerra Mundial. 

Animales pocos comunes en el apoyo para el ser humano podría ser los cobayos, sin embargo un estudio encontró que los niños con trastorno del espectro autista estaban más tranquilos mientras jugaban con ellos.  

No podemos dejar a un lado el gran trabajo que realizan los delfines como parte de la terapia asistida para lograr mejorar la sintomatología en personas afectas de ciertas patologías. 

Esta terapia se realiza mediante la colaboración de los delfines y bajo la supervisión de un terapeuta cualificado que ayuda a mejorar el estado social, emocional, físico o psíquico del paciente. 

Los delfines son un excelente animal que por instinto propio les encanta la interacción con las personas. Estos mamíferos emiten ondas para orientarse y comunicarse. Emitiendo clics y recibiendo continuamente las ondas sonoras por lo que logran activar funciones biológicas básicas como la circulación sanguínea y el metabolismo.  

Los animales han demostrado el gran corazón que tienen al arriesgar su vida por un humano. Es importante ser recíproco con ellos ya que si bien no hablamos el mismo idioma, sabemos que contamos con una pata o una aleta para apoyarnos.