SMDIF y IJMP llevan a cabo el “Conversatorio Entre Generaciones”

Cuatro jóvenes y cuatro adultos mayores participaron en la dinámica de preguntas y respuestas del conversatorio.

Arremángala, arrempújala, sí, arremángala, arrempújala, no
Cortesía Ayuntamiento Arremángala, arrempújala, sí, arremángala, arrempújala, no

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Agosto es el mes de los jóvenes y de las personas adultas mayores, distantes en edades y experiencia, pero con ganas de escuchar y ser escuchados, por ello el Ayuntamiento de Puebla que encabeza Eduardo Rivera Pérez a través de la coordinación entre el Sistema Municipal DIF (SMDIF) y el Instituto de la Juventud del Municipio de Puebla (IJMP) llevaron a cabo el “Conversatorio Entre Generaciones”.

Para Liliana Ortiz Pérez, Presidenta Honoraria del Patronato del SMDIF este fue un encuentro pacífico en donde se lograron coincidencias entre ambas generaciones a través del diálogo, recalcó que estos ejercicios son vitales para la familia pues propician que las tradiciones continúen, promueve el respeto a las nuevas ideas y fomenta el desarrollo del individuo en un ambiente saludable, así es como se sabe amado, respetado y aceptado. 

Por su parte, Karla Martínez Lechuga, Directora del IJMP agradeció a las y los participantes por compartir consejos y puntos de vista, señaló que para construir una mejor sociedad es importante contrastar ideas, escuchar, pero sobre todo respetar las diferentes opiniones. 

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Este encuentro tuvo como sede el Parque Biblioteca, participaron cuatro adultos mayores y cuatro jóvenes para hablar sobre los cambios que han visto al pasar los años y como lo perciben a través de sus ojos y experiencias como los logros de las mujeres, el compromiso, medio ambiente y la inclusión de las redes sociales en la vida, entre otros temas, median preguntas y respuestas.

Las relaciones entre ambos colectivos traen varios beneficios, para las personas adultas mayores les ayuda a conseguir cambios positivos de humor y un aumento significativo de la vitalidad, la autoestima, la motivación, la valía personal y la sensación de ser necesitados; mientras que para los jóvenes esta experiencia les brindó alegría y apoyo por parte de los adultos en la resolución de problemas desde otro punto de vista.