Escuela Normal Rural "Carmen Serdán" de Teteles abre sus puertas

Docentes, directivos, personal de apoyo y administrativo iniciaron labores en los turnos programados

Después de poco más de tres meses de que estudiantes tomaron las instalaciones de la Escuela Normal Rural "Carmen Serdán", ubicada en el municipio de Teteles de Ávila Castillo, se reanudaron las clases presenciales de manera normal.

 

Así lo informó la Secretaría de Educación Pública (SEP), que detalló que los docentes, directivos, personal de apoyo y administrativo iniciaron labores en los turnos programados, además las alumnas que organizaron las manifestaciones y la toma de las instalaciones se encuentran tomando clases de manera normal.

 

“Cada uno de los actores de los procesos educativos han retomado sus actividades en todas las áreas de trabajo, incluidas también las alumnas que forman parte del comité estudiantil”, explicó.

 

Por último, la dependencia destacó que permanecerá vigilante del derecho a la educación de las aprendientes que se reincorporan a sus actividades normales con el objetivo de concluir sus estudios sin contratiempos y no perder el semestre actual.

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¿Qué pasó en Escuela Normal Rural "Carmen Serdán"?

 

Las estudiantes alegaron que el Gobierno de Puebla estaba intentando eliminar el modelo normalista rural, además de que estaba realizando acciones de hostigamiento en su contra, razón por la que las estudiantes tomaron el plantel desde el pasado 6 de septiembre, además organizaron una protestas en la Ciudad de México buscando el respaldo del gobierno federal para lograr la destitución de los directivos.

 

También organizaron una marcha en la capital poblana donde elementos de seguridad estatal utilizaron abuso de poder para amedrentar, golpear y encarcelar a las chicas que participaron.

 

Cuando estas denunciaron el propio gobernador negó esto fuera cierto, incluso defendiendo a los elementos diciendo que las estudiantes habían golpeado a los elementos de seguridad.

 

El conflicto se originó cuando los administrativos realizaban la asignación de dormitorios y entregaban un juego de cobertor y sábanas a cada una de las estudiantes de nuevo ingreso. Alumnas de últimos semestres lo impidieron, al acusar que se trataba de un despojo porque los directivos llevaban a cabo una actividad que realiza el Consejo Estudiantil.

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