Acusan a socio de Olivia Salomón de arrebatar predios de Huauchinango para su negocio personal
Los documentos que presentaron los hermanos Fernández avalan que ellos son los propietarios de las fracciones de tierra en esta zona.
El exfuncionario morenovallista y actual titular de la Secretaría de Ordenamiento Territorial y Vivienda de Tlaxcala, Diego Corona Cremean lleva 5 años adueñándose de propiedades que le pertenecen a la familia Fernández y otros poseedores de tierras en el municipio de Huauchinango. Todo empezó en el 2018, cuando a Juan Ramón Fernández y su hermano Tuss Fernández les comenzaron a negar el acceso a sus propiedades. No contaban con que años después estas estarían en posesión de Diego Corona. En 2020, el panista les ofreció comprarles sus fracciones de tierra, pero ellos se negaron. Tras esta negativa, Diego Corona realizó amenazas en contra de Juan Ramón Fernández. Asimismo, cada vez que los intentaban entrar a su propiedad, se encontraban con gente armada, hasta que llegó el momento en el que simplemente ya no pudieron acceder. El funcionario del gobierno de Tlaxcala ya había avalado que las fracciones de esta familia, los Villa y campesinos, le pertenecían unicamente a él. Un predio de más de 80 hectáreas, una serie de irregularidades y múltiples escrituras falsas, han provocado una disputa que no puede terminar. Juan Ramón Fernández y su hermano Tuss Fernández han dado batalla incansable durante años para recuperar sus propiedades; pero cada vez que dan un paso y avanzan, el exmorenovallista Diego Cremean les pone el pie para evitar que ellos hagan posesión de lo que les pertenece Las escrituras originales son de los hermanos FernándezLos hermanos Fernández, aseguran que las escrituras originales muestran la compra de una fracción del predio llamado Ahuacatitla, que les pertenece a ellos. El abuelo de Tuss y Juan compró cuatro propiedades y puso dos a nombre de los hermanos, en tanto que las otras dos estaban a nombre de su padre. Pasado el tiempo, los papás de los hermanos se divorciaron y las otras dos propiedades (que estaban al nombre del padre) las adquiere Juan Ramón por donación. Lo que refiere que esas cuatro propiedades eran de ellos. Sin embargo, cuando muere el abuelo, su segunda esposa -como le llama Tuss- vendió dos propiedades a Francisco Xavier Berganza; pero nunca contó con que él las donaría a la Fundación Casa Dos Manos contra adicciones, misma que preside Diego Corona Cremean. Diego Corona abusa de poder e influenciasLos documentos que presentaron los hermanos Fernández en entrevista a El Popular, periodismo con causa, avalan que ellos son los propietarios de las fracciones de tierra en esta zona. Lo que sucedió fue que Diego Corona, con ayuda de la actual secretaria de economía Olivia Salomón y Paulo Javier Rodríguez Cantellano de la notaría 1 de Tepeaca, logró obtener escrituras falsas que aseguran que la fracción de los Fernández le pertenecía a él. Cabe mencionar que el funcionario Paulo Javier Rodríguez Cantellano actualmente le fue retirada la patente debido a falsificación de documentos. Ello puede comprobar que los documentos de los Fernández puderion haber sido falsificados a favor de Diego Corona. Sin más, el exfuncionario público tomó ventaja de su poder e influencias para adueñarse de las fracciones de tierra que le pertenecían también a los Villa y a campesinos que viven en la zona. Cabe señalar que, si bien Diego Corona también es dueño de fracciones de terrenos, no todos le pertenecen a él, tal como quiere hacer creer. Corona Cremean se aprovechó para hacer con estas propiedades lo que ha querido: talar árboles, sacar a vecinos de la zona, comprobar que las fracciones de tierra eran suyos y despojarlos de sus propiedades; incluso construyó un muro para prohibir el paso a estas familias, y cuando los Villa tiraron este muro para luchar por sus tierras, Diego decidió demandarlos por allanamiento. Ducto de Pemex podría ser un motivo del despojoLa razón principal por la que los hermanos comenzaron a exigir sus propiedades fue porque se dieron cuenta que dentro de su terreno estaban extrayendo huachicol de un ducto de Pemex que pasa por su propiedad. Ellos nunca autorizaron ningún ilícito relacionado con huachicol. Hace dos años hubo una explosión debido a esta toma clandestina, lo cual provocó ruido en medios de comunicación; pero no hubo detenidos y ninguna autoridad quiso tomar cartas en el asunto. Cabe mencionar que Pemex tiene total conocimiento de las tomas clandestinas de combustible pero se niega a ingresar a las propiedades afectadas. El pasado 18 de agosto, encontraron otra toma clandestina que se mantenía incontrolable, y ni Pemex, ni la policía dieron más información; al mismo tiempo que Diego Corona negaba que esta toma clandestina existiera. Utilizan Narconon para tapar ductosLo peor de todo es que los hidrocarburos se encuentran debajo de Narconon, un centro de rehabilitación para personas con adicciones. Para disfrazar los ilícitios, este centro opera para acompañar a jóvenes que tienen problemas de drogas y alcoholismo. Y durante dos meses pueden vivir en las intalaciones de Narconon (que es enorme) para tratar su adicción. El centro cuenta con unas cabañas super modernas y lujosas, así como grandes ventanales con árboles alrededor. Para las personas que van en búsqueda de ayuda puede parecer algo de mucho nivel para ser un centro de rehabilitación, pero en realidad no saben la infinidad de mentiras que hay alrededor de Narconon. Cabe mencionar que la secretaria de economía, Olivia Salomón Vivaldo, es accionista de este centro y en 2018 fue inaugurado por ella junto a su socio Diego Corona. Pese a todas estas irregularidades, para Diego Corona nada de esto es cierto; no hay tomas clandestinas, ni tala de árboles, y todos los terrenos le pertenecen a él. En palabras de Juan Ramón y Tuss Fernández, estos predios les pertenecen gracias al esfuerzo realizado por su abuelo y su padre, y no a esta persona que simplemente se lo quiso quedar. |