Vivir de la música es, de entrada, saber que no se podrá tener grandes ingresos, es cambiar la percepción de remuneración por trabajo y saber que se recibe un sueldo por hacer lo que gusta.

De hecho, hay algunas personas que forman bandas de rock y no reciben, en ocasiones, ingreso alguno. Es solo amor al arte, amor al rock.

Hablar de prestaciones o trabajo formal es más complicado aún, el 90% de los músicos no tiene un empleo en el que le den contrato, de acuerdo a estimaciones del Sindicato Único de Trabajadores de la Música del Estado de Puebla.

En el marco del Día Internacional del Músico, Annuar Abdala compartió a El Popular, periodismo con causa, su experiencia como fundador de la banda de rock ‘Pakal’ y los principales retos a los que se enfrenta un artista musical en Puebla.

Annuar relató que la banda surgió porque dos de sus vecinos tenían el interés y anteriores proyectos similares; en una conversación notaron la coincidencia del deseo de fundar una banda de rock.

En ese momento, los tres integrantes aún eran estudiantes, por lo cual tenían el tiempo y la disposición para ensayar; narró que los fines de semana practicaban a altas horas de la madrugada y ni siquiera se daban cuenta del paso del tiempo porque lo disfrutaban.

“Casualmente se dio que todos en una misma casa, todas las personas que estábamos ahí éramos músicos. En la música conocí a David y Aarón, con quienes formé la banda”, relató.

Los papeles en esta banda de rock eran claros y por afinidad de cada integrante, David era el vocalista y bajista, Arón el guitarrista, y nuestro entrevistado, Annuar Abdala, el baterista.

Un detalle importante que nos reveló es que ninguno cuenta con estudios académicos en materia de música, pues todo lo han aprendido de una manera empírica y autodidacta.

Destacó que su principal motivación para fundar la banda de rock no fue el dinero, sino innovar en el ámbito musical y sobre todo realizar con sus amigos aquello que le apasiona.

Su primera presentación ante el público fue en un evento organizado por McCarthy's, ‘Guerra de bandas’, donde tuvieron que mandar un demo y, al ser aceptados, participaron en el establecimiento de Cholula.

Nos compartió que en este evento no obtuvieron ningún premio; sin embargo, le sirvió para codearse con otros artistas del mismo género, quienes les compartieron algunos tips y alentaron su trabajo. 

Annuar señaló que a lo largo de cinco años han realizado alrededor de 20 presentaciones, las cuales no han sido compensadas económicamente.

Compartió que en algunos establecimientos y, en especial en bares, les daban el espacio para tocar pero solo les ofrecían cervezas.

Ante esta constante tomaron la decisión como agrupación de grabar ‘La Trinidad de Jade’, material disponible en Spotify.

Compartió que desde hace ocho meses Pakal no ha tenido ensayos ni presentaciones, debido a que los intereses de cada integrante se han ido modificando debido a sus responsabilidades familiares, pero contemplan volver a activar la banda.

“Hay muchas bandas buenas en Puebla, pero se va sumando la vida diaria y te va bloqueando un poco; ahorita ya no somos estudiantes, somos asalariados y estamos pensando volver a reestablecer”, comentó.

“En este día del músico vayan a todas las bandas underground que existan en Puebla y si tienes a un amigo que toca música, apóyalo alentándolo y asistiendo a sus eventos en la medida que te sea posible”, compartió.

Annuar finalizó la entrevista refiriendo que en el estado de Puebla hay mucho talento en diferentes géneros musicales, pero, no obstante, las necesidades económicas rebasan la posibilidad de estar en un grupo y cumplir ese sueño musical.

Violinista afirma que se puede vivir de la música

En entrevista con El Popular, periódico con causa, Irene Cuéllar nos compartió su experiencia como violinista desde hace 15 años; afirmó que se desempeña en el ámbito musical de tiempo completo y como única fuente de ingreso.

 "Me desempeño como violinista en la Orquesta Sinfónica del estado de Puebla y de vez en cuando colaboro en otros proyectos independientes", compartió la violinista.

Irene comentó que empezó a estudiar violín desde hace 15 años y actualmente es su fuente de ingreso económico.

Relató que su principal inspiración fue su abuelo materno, quien también era músico y la adentró en sus principios musicales.

Él le enseñó a tocar el piano y ese fue su primer acercamiento a la música, despertando su interés y ganas de aprender acerca de esta disciplina.

Poco tiempo después decidió ingresar a los talleres gratuitos que ofrecía su escuela y fue cuando eligió el violín, sin darse cuenta que se convertiría en su mayor pasión en la vida.

Al igual que en el caso de Annuar, nos compartió que los principales retos a los que se ha enfrentado en su carrera como artista musical son las escasas oportunidades.

"Que no siempre hay muchos apoyos para los estudiantes e incluso para los profesionistas, y que muchas veces las escuelas de música carecen de maestros apasionados y comprometidos con la enseñanza, así como de la infraestructura adecuada para un buen aprendizaje musical", opinó.

Pero en su paso por la música no todo ha sido negativo, pues refirió que una de las cosas que más ha disfrutado es viajar como parte de su carrera artística.

"La música me ha abierto muchas puertas y gracias a ella he tenido la oportunidad de viajar dentro y fuera de México y de acompañar y conocer a muchos músicos profesionales a los que admiro y de los que he aprendido mucho", aseguró Irene. 

Por último, compartió un mensaje para todas aquellas personas que inician en la música o tienen un interés genuino por practicarla.

"Que no es una carrera sencilla. Es muy demandante y requiere de mucho compromiso y esfuerzo, pero que vale totalmente la pena. Que nunca se rindan y que a pesar de que el gremio suele ser un poco difícil y competitivo, siempre habrá personas que estén dispuestas a ayudar y a compartir sus conocimientos. La música es un arte muy bello y noble; vale totalmente la pena esforzarse por ella pues puede abrirnos muchos caminos y regalarnos experiencias increíbles y satisfactorias", compartió.

Irene Cuéllar resaltó que en la carrera artística musical es indispensable hacer aliados y que siempre hay alguien que te puede apoyar a pesar de ser un ámbito muy competitivo.

Es importante resaltar que ambas personas entrevistadas compartieron realidades totalmente distintas, tanto en los géneros musicales en los que se desempeñan como en las retribuciones económicas y vivencias surgidas a partir de su interés por la música.

La música en general es un arte poco retribuido económicamente, pero las bandas underground que surgen por convención de los mismos integrantes tienen menos oportunidades que los géneros más institucionales y sobre todo en orquestas ya fundadas.

Sin embargo, ambos coincidieron que en el estado de Puebla faltan muchas oportunidades para todos los músicos y que lo que hace salir a flote este sueño es la motivación y compañerismo de otros músicos.