La Secretaría de Energía (Sener) aseguró que “no existe desabasto de gas LP en el país” y que la disponibilidad del combustible en las terminales de almacenamiento y reparto se encuentra dentro de los parámetros normales. La dependencia atribuyó los señalamientos recientes a “procesos operativos habituales” y reiteró que el suministro para hogares y comercios está garantizado. Sin embargo, desde el 4 de noviembre, asociaciones del sector han advertido complicaciones para mantener el ritmo de distribución. El Gremio Gasero Nacional reportó ese día que las plantas de Pemex no estaban entregando gas LP con normalidad a los repartidores, lo que generó retrasos y reducción en la cantidad de producto despachado. Por su parte, la AMEXGAS y otras agrupaciones señalaron que, aunque no se trata de un desabasto técnico, sí se observa un racionamiento del suministro en varias entidades del centro del país, incluyendo Ciudad de México, Estado de México, Tlaxcala, Veracruz y Puebla, donde distribuidores han experimentado restricciones para cargar sus unidades. Te puede interesar: ¡Prepárate! Continuará el racionamiento de gas LP en Puebla por retrasos en Pemex Factores operativos y regulaciones locales complican el abastoEn la Ciudad de México, distribuidores reportan filas en las terminales y menor disponibilidad del combustible. De acuerdo con las asociaciones, la situación se agravó tras las nuevas regulaciones para el tránsito de pipas de gas LP, implementadas luego de la explosión de una unidad en el Puente de la Concordia, en Iztapalapa. Las restricciones de movilidad han limitado el acceso a las plantas y reducido la cantidad de viajes por día, afectando la oferta final para los consumidores. En estados como Puebla, distribuidores han registrado igualmente dificultades para obtener el volumen requerido, lo que ha derivado en entregas más espaciadas y ajustes temporales en rutas.
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