Autonomía fiscal en México: Puebla y los desafíos de recaudación propia

La autonomía fiscal hace referencia al esfuerzo que las entidades federativas realizan para mejorar su capacidad de ofrecer bienes y servicios, reduciendo su dependencia de las transferencias del gobierno federal.

En 2023, con datos recabados en el Informe Estatal de Gasto 2024, realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), se determinó que las 32 entidades federativas en México recaudaron un total de 2.97 billones de pesos. Sin embargo, solo el 15% de esta cantidad fue generado por las propias entidades federativas.

Estos mismos datos reconocen que Puebla tiene un 9.2% en la participación de ingresos propios, considerando los impuestos, aprovechamientos, contribuciones de mejoras, ingresos por ventas de bienes y servicios, y cuotas y aportaciones al seguro social. Esto refleja la limitada autonomía fiscal que tiene Puebla en comparación con otros estados del país.

La reducción de la dependencia fiscal del gobierno federal presenta una oportunidad para los estados de mejorar servicios y proponer nuevas estrategias para incrementar el impacto de las retribuciones dentro del mismo estado.

Parte del ejercicio fiscal para obtener la autonomía de los estados es trabajar en la obtención de recursos a través de diferentes impuestos; sin embargo, el reporte presentado por el IMCO reconoce que solo 16 estados han cobrado impuestos por tenencia vehicular y 12 estados han cobrado impuestos a la venta final de bebidas alcohólicas. Esto muestra que no todos los estados tienen transparencia en el cobro y gasto de los impuestos.

Esfuerzo Fiscal Estatal

A nivel nacional, existen registros de que 22 estados aumentaron su autonomía fiscal en 2023, mientras que en 10 entidades esta disminuyó.

Entre 2015 y 2023, la participación de los ingresos propios de los estados se mantuvo prácticamente sin cambios, pasando de un 15.4% a un 15.5%.

En el caso de Puebla, la autonomía fiscal aumentó un 0.3% en 2023. Los estados que más aumentaron su autonomía fiscal fueron Baja California Sur con 7.7%, Zacatecas con 5.8% y Chiapas con 5.5%. Los estados que más disminuyeron su autonomía fiscal fueron Guanajuato (-6.9%), Ciudad de México (-6.6%) y Aguascalientes (-2.9%).

Cabe mencionar que, aunque Puebla aumentó su autonomía fiscal, este aumento es mínimo en comparación con otros estados de la república.

¿Por qué mejorar la autonomía fiscal?

Las entidades federativas consideran la autonomía fiscal como una oportunidad para proveer mejores bienes y servicios en sus estados.

El reconocimiento y transparencia de las recaudaciones y el gasto público implican una mayor credibilidad y legitimidad ante la ciudadanía, así como una inversión mayor en áreas como energía, industria, salud, movilidad y educación, reduciendo así la vulnerabilidad que pueden ofrecer las transferencias del gobierno federal.