Adicciones, un problema cerebral más allá de la moralidad

Dependiendo de la intensidad de los efectos de una determinada sustancia, más persistente va a ser la necesidad o el deseo de experimentarlos de nuevo.

Problema cerebral en personas con adicciones
Fredy Angón Problema cerebral en personas con adicciones

Las personas que atraviesan por una situación de adicción usualmente reciben comentarios sobre moralidad, pero actualmente es bien sabido que puede tratarse de una condición cerebral que supera la voluntad de quien la padece.

El neurocientífico y podcaster estadounidense Andrew Huberman habló en una entrevista sobre algunas características que suelen tener las personas adictas y reveló que 1 de cada 10 adultos lucha actualmente contra una adicción.

La dependencia de alguna sustancia en la vida adulta puede ocurrir porque, con el paso de los años, la salud mental empeora, las familias se rompen y el futuro se empieza a ver con cierto pesimismo.

Huberman asegura que el camino hacia la adicción suele empezar con sutiles señales de alarma, pero es más probable adquirirla si hay falta de habilidades de afrontamiento y un cúmulo de estrés considerable (estudios, trabajo, problemas familiares), así como ciertos rasgos en la genética.

Incluso con solo uno de estos tres factores, una persona con un nivel educativo medio puede recorrer este peligroso camino. Del mismo modo, aunque tenga la vulnerabilidad genética, no necesariamente se convertirá en adicto.

Por ejemplo, ver pornografía de manera regular toca fibras sensibles del cerebro, lo que le da cierto placer al espectador, o un joven de 15 años que prueba el alcohol por estrés o curiosidad.

Lo cierto es que en ambos casos, el cerebro aprende que las sustancias proporcionan un alivio temporal y comienza un círculo vicioso. Si no hay intervención oportuna, este camino suele conducir a la cárcel o incluso la muerte.

¿Qué pasa en el cerebro de una persona adicta?

De acuerdo con el Servicio de Psiquiatría, Psicología y Medicina Psicosomática del Hospital Universitario Quirón Dexeus, los neurotransmisores implicados en el cerebro de alguien que ha creado dependencia de algunas sustancias son los del sistema dopaminérgico, serotoninérgico, gabaérgico y opioides endógenos, entre otros.

Dependiendo de la intensidad de los efectos de una determinada sustancia, más persistente va a ser la necesidad o el deseo de experimentarlos de nuevo; deseo que puede dispararse en determinadas situaciones y que también puede poner en marcha comportamientos automáticos de búsqueda y consumo de dicha sustancia