Puebla podría ser una ciudad universitaria: Mario Patrón

El rector de la Universidad Ibero Puebla resaltó que en la Angelópolis confluyen hasta 300 mil estudiantes universitarios

Mario Ernesto Patrón Sánchez
Freddy Angón Mario Ernesto Patrón Sánchez

Por ser un destino educativo relevante, el gobierno del estado debería convertir a Puebla en una ciudad universitaria, reconoció el rector de la Ibero, Mario Ernesto Patrón Sánchez.

En el marco de su quinto informe de labores, Patrón Sánchez aseguró que se trata de una asignatura pendiente luego de que año con año en la capital se tengan entre 250 y 300 mil estudiantes universitarios.

“Deberíamos ir mudando a Puebla como la ciudad de los universitarios y eso tendría que pasar por muchas pautas de política pública, acceso a la vivienda, calidad en el servicio del transporte, sólo por poner dos ejemplos”, explicó en entrevista para El Popular, periodismo con causa.

El rector de una de las universidades más importantes del país también reconoció que esa iniciativa no sólo es responsabilidad del gobierno, sino que se tendrían que “generar un concierto de voluntades entre sociedad civil, poder privado y poder público, para lograr Puebla como una ciudad universitaria”.

Pese a reconocer que las y los jóvenes son el presente y el futuro del país, aceptó que las universidades le han fallado a las y los estudiantes, pues no han sabido estar a la altura de sus necesidades.

“De pronto creo que las universidades somos muy históricas para bien, pero para mal quiere decir que nos movemos lentas y nos cuestan los procesos de cambio…. Nos movemos, pero no con la prontitud y la agilidad que demanda la realidad”, detalló.

Un futuro alentador para México

Al hablar de temas políticos, el jesuita reconoció que ante la falta de contrapesos en el Congreso luego del arrollador triunfo de Morena en las urnas, se percibe un futuro alentador para México, debido a algunos avances del gobierno en turno, como la disminución de la pobreza y el aumento del salario mínimo, pero sobre todo en el rol activo que puedan jugar las y los jóvenes.

“El presente y el futuro del país está en las juventudes, así lo muestran indicadores claros como el padrón electoral; ósea, estamos hablando de más de 20 millones de jóvenes que estaban convocados a las elecciones pasadas”, dijo el rector de 47 años de edad.

A falta de opciones que los tomen en cuenta como actores de cambio, Patrón Sánchez insistió en que las universidades deben de apostar a formar jóvenes críticos y comprometidos, además de ser un espacio semilla para germinar propuestas de cambio y transformación.

“Tienen que ser jóvenes consientes del mundo en el que viven, competentes para el ejercicio de su profesión, pero también competentes para la vida y eso nos lleva a que deben de ser críticos y comprometidos, porque es lo que permite que ellos sean agentes de cambio y de transformación”, explicó.

El mayor reto de México: la oposición inexistente

Para concluir, Mario Ernesto Patrón aseveró que el mayor reto que se percibe luego de los resultados de las elecciones pasadas, no sólo tiene que ver la mayoría de Morena en el Congreso, sino con una oposición prácticamente inexistente. 

“Indudablemente vamos a tener retos asociados a la gobernanza saludable del país y que tienen que ver con lo que los teóricos llaman ‘el problema de las mayorías’, pero este país también tiene un gran problema en términos de la oposición… No hay un contrapeso de oposición política porque está vaciada, porque está vaciado el PRI, el PAN”, aseguró quien lleva 5 años al frente de la Ibero Puebla.

El rector de la universidad que ha destacado por asumir una postura crítica, reconoció que existen focos rojos y de preocupación en el país, pese a los avances que hubo en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), en temas de derechos sociales y la disminución de la pobreza.

“Veo focos ámbares, incluso, algunos focos realmente rojos y de preocupación como la Guardia Nacional, la prisión preventiva oficiosa; sería un retroceso eliminar el INAI y con el Poder Judicial se tendría que pausar la discusión; ¿se tiene que reformar? ¡Sí!; ¿esta reforma acercaría a la ciudadanía al acceso a la justicia?, No”, reconoció el maestro en Derechos Humanos y Democracia.