Maternidad subrogada un pendiente legislativo

El Congreso de Puebla tiene un pendiente: la Ley de Maternidad Subrogada, que es un acuerdo en el que una mujer, llamada gestante, lleva y da a luz a un bebé para otra persona o pareja que no puede tener hijos.

Una situación de este tipo se presentó en la semana reciente en Puebla, cuando un sujeto embarazó a una mujer, y los papás del tipo le ofrecieron a la mujer que tuviera al bebé y después ellos se hacían cargo.

En julio de 2010, la entonces diputada poblana Rocío García Olmedo presentó una iniciativa de ley para la maternidad subrogada en Puebla, a fin de evitar la explotación y violencia contra las mujeres, protegiendo a los menores, pero dicha iniciativa se quedó en la congeladora legislativa.

Dicha iniciativa planteaba crear la figura jurídica de madre gestante, quien puede prestar su vientre a fin de concebir al hijo de otras personas que no puedan tenerlo, mediante un contrato entre dos partes.

Por ello, se planeaban tres figuras: madre gestante, quien presta su vientre; madre subrogada, mujer que otorgará su material genético a la otra persona para tener a su hijo; y el padre subrogado, donante.

Para que esto pudiera permitirse, el contrato entre las dos partes se planeaba generar mediante una notaría, donde los padres solicitantes validarían su relación, que no cuentan con problemas de salud y que evidencian que la mamá sufre problemas de reproducción.

Mientras que la madre gestante también debía acreditar tener buena salud, además de comprobar que no tiene problemas de adicción, pues en todo momento sería vigilada.

Esta iniciativa pretendía evitar que las mujeres fueran obligadas a reproducirse, y que los menores fueran explotados; sin embargo, dicha iniciativa jamás fue analizada por los diputados en los últimos 14 años.

El caso de Lourdes

Esta ley pudo haber protegido el caso de Lourdes, una mujer que el 2 de octubre otorgó a su bebé a una familia debido a que no podía hacerse cargo.

Esta situación alertó a las autoridades, ya que la familia de Lourdes no sabía del acuerdo y denunció que su nieta fue sustraída de la clínica Centro de Maternidad Santiago, lo cual provocó que el director, Santiago de la Rosa, evidenciara el caso.

Lourdes quedó embarazada de su novio, pero él le comentó que no la iba a apoyar, por lo que acudió con los padres del joven, quienes le dijeron que tuviera a la bebé. Posteriormente, los padres del novio de Lourdes se hicieron cargo de los gastos médicos y del pago del parto, y cuando nació su nieta, se la llevaron con ellos.

Sin embargo, Lourdes se arrepintió y su madre, al desconocer el trato, denunció ante la Fiscalía General del Estado (FGE) que su nieta había sido raptada. Horas después, fue hallada.