Puebla entre los seis estados con menor acceso a una alimentación de calidad
En la capital poblana, según datos del Coneval 2020, se estima que alrededor de 700 mil personas viven en situación de pobreza alimentaria
Puebla, según datos del INEGI de 2020, presenta un preocupante 45% de incertidumbre alimentaria, lo que indica que casi la mitad de la población en el Estado no tiene certeza sobre si podrá alimentarse cada día. La pobreza alimentaria se refiere a la preocupación constante de los habitantes por acceder a una alimentación digna. A nivel nacional, los mexicanos destinan el 35% de sus ingresos a la compra de alimentos, bebidas y tabaco, lo que resalta el alto costo que representa el sustento diario en la vida de las familias. Con motivo del Día Mundial de la Alimentación, conmemorado cada 16 de octubre, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) destaca que Puebla se encuentra entre los seis estados con menor acceso a una alimentación de calidad, un indicador alarmante que refleja las dificultades en la oferta alimentaria y las condiciones materiales de sus habitantes. En la capital poblana, según datos del Coneval 2020, se estima que alrededor de 700 mil personas viven en situación de pobreza alimentaria, lo que significa que no tienen acceso suficiente a alimentos variados, nutritivos y adecuados para garantizar un desarrollo humano pleno. Este escenario es aún más crítico en regiones como la Sierra Negra, donde 9 de cada 10 habitantes viven en condiciones de pobreza, y en 9 municipios poblanos, más del 50% de los niños padecen pobreza alimentaria. Frente a esta realidad, el gobierno estatal ha implementado medidas como la entrega de despensas, invirtiendo 95 millones de pesos para adquirir 165 mil paquetes alimentarios en apoyo a los sectores más vulnerables. Además, existen programas como el Banco de Alimentos Cáritas, que reúne productos en especie para combatir la pobreza alimentaria en el estado. A pesar de estos esfuerzos, la lucha contra la pobreza alimentaria en Puebla requiere una estrategia integral que involucre a todos los sectores de la sociedad. Es indispensable fortalecer las políticas públicas que promuevan la seguridad alimentaria, mejorar las infraestructuras y cadenas de suministro, así como fomentar la educación nutricional para asegurar que todos los poblanos tengan acceso a una alimentación digna y saludable. La pobreza alimentaria no solo implica la falta de alimentos, sino también la carencia de calidad y nutrición adecuada. Es un desafío que Puebla debe afrontar con determinación, buscando soluciones sostenibles que permitan a sus habitantes vivir con la dignidad que merecen |