Jueves 23 Octubre 2025

La tarde del miércoles 22 de octubre, la muerte de Yusvely Marianny, de 20 años de edad, conmocionó a los poblanos y poblanas. La joven venezolana perdió la vida tras arrojarse del puente peatonal que conecta al CIS  con la zona de Angelopolis, en Vía Atlixcáyotl.

Poco antes de tomar su decisión, Yusvely compartió en redes sociales un mensaje de desesperanza, donde acusó a un familiar cercano por presunto abuso sexual. Asimismo, sostuvo una última llamada telefónica con su pareja sentimental, quien alertó a las autoridades, pero no acudieron a tiempo. 

Este hecho se suma a las cifras de suicidio obtenidas durante los primeros meses del 2025 y compartidas por Umi Choda Morales, directora del Centro Poblano de Salud Mental Integral para Niñas, Niños y Adolescentes (CEPOSAMI).

La funcionaria estatal indicó que, en promedio, se reporta un suicidio cada dos días, lo que acumula un total de 123 casos en Puebla, correspondientes a niños, niñas y adolescentes. Mientras que a nivel mundial  las cifras alcanzan los 700 mil suicidios por año.

En el país se han contabilizado ocho mil 856 defunciones por suicidio, siendo los jóvenes de 18 a 29 años los más vulnerables, debido a su estado de salud mental, ya que son propensos a presentar episodios de depresión o ansiedad. 

Carlos Alberto Oliver Pacheco, titular de la Secretaría de Salud de Puebla, informó que los servicios de psiquiatría han atendido un total de 992 menores de edad por ansiedad y depresión, con un promedio de 125 casos mensuales

La línea de la vida 

En México se encuentra habilitada la Línea de la Vida, disponible las 24 horas del día, en donde las personas en riesgo podrán encontrar orientación psicológica gratuita y confidencial. A su vez, el Gobierno de México cuenta con un cuadernillo en donde expone información básica sobre la prevención al suicidio, mismo que puede ser consultado para brindar acompañamiento a quienes puedan estar atravesando por un momento difícil. 

¿Cómo puedo apoyar a alguien en una situación de riesgo? 

  • Escuchar con apertura y respeto
  • Mantener la calma y evaluar la severidad
  • Permitir que la persona termine de expresarse
  • Mostrar apoyo y derivar su caso a los servicios de emergencia en caso de ser necesario 
  • Dar seguimiento a los días posteriores a la situación de riesgo 
  • Promover factores protectores, reiterar que estás ahí para acompañar