Sin duda, China es el país que domina estos Juegos Olímpicos. Sus programas de formación de atletas dan resultados mucho más que sorprendentes. Para muestra, lo que hizo Quan Hongchan es increíble cuando, desde la plataforma de 10 metros, hizo un clavado de 3.2 grados de dificultad tan perfecto que no hubo duda entre los jueces: mereció un 10 de calificación.

Quan Hongchan tiene apenas 14 años.

Los últimos serán los primeros, dicen. Y así fue con la pequeña Hongchan, quien estuvo al fondo de la lista de salida, escalando hasta la cima desde su primer salto. En el siguiente fue cuando enmudeció el Centro Acuático de Tokio, enamorando a los jueces con un clavado perfecto, obteniendo siete dieces de los calificadores.

En su participación en la final de clavados desde la plataforma de 10 metros, en Tokio 2020, Quan acabó con 446.20 puntos, después de que en la segunda, cuarta y quinta ronda su desempeño fue increíblemente destacado.

Aún así, esta chica increíble dijo que “no me considero un prodigio. De hecho, no soy muy brillante, no se me dan bien los estudios”. Aunque eso sí, es la primera vez que compite fuera de China y afirmó que “no estaba demasiado nerviosa”.

Quan dedicó la victoria a su madre, que está enferma. “Quiero ganar suficiente dinero para mantenerla", dijo a través de un intérprete. “Escucho a mi entrenador con mucha atención y sigo sus instrucciones con mucho cuidado".

La perfección en la piscina de saltos recordó, salvando las distancias, la del célebre salto de la gimnasta rumana Nadia Comaneci, el 18 de julio 1976, en los Juegos Olímpicos de Montreal. Fue la primera vez que se obtenía un 10 en la historia de la gimnasia.

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Con el presidente del COI Thomas Bach en la tribuna del Centro Acuático, Quan terminó con una cómoda ventaja. Su compatriota Chen Yuxi se quedó con la plata con una puntuación de 425,40.

Chen, de 15 años, ganó el título de plataforma en los mundiales de 2019 y se colgó en oro en estos Juegos en los sincronizados junto a su compañera Zhang Jiaqi. Pero Quan, la integrante más joven de la delegación china en Tokio — estuvo a otro nivel.

Esta es la cuarta competencia olímpica consecutiva en la que China se lleva todos los oros disponibles en el concurso femenino.

La australiana Melissa Wu reclamó el bronce con  371,40 puntos para la segunda presa olímpica de su carrera.

Wu, de 29 años y que competía en sus cuartos Juegos, también ganó la plata en plataforma sincronizada junto a Briony Cole en Beijing 2008.

La mexicana Gabriela García Agúndez terminó en la cuarta posición y su compatriota Alejandra Orozco ocupó el sexto lugar. La dupla se colgó el bronce la semana pasada en los sincronizados.