Conoce los efectos positivos de los huracanes en el planeta
Aunque son devastadores, estos fenómenos tienen efectos que contribuyen a luchar contra el calentamiento global.
El paso de un huracán siempre nos recordará cuán poderoso y devastador pueden llegar a
ser estos fenómenos. A menudo, luego de la trayectoria de un huracán por cierta
zona queda un panorama de destrucción y de muerte. Sin embargo, no todo es malo
pues tienen funciones medioambientales claves. Aunque esto parezca difícil de creer, los huracanes y las
tormentas tropicales generan efectos
positivos en el planeta y sobre todo en los océanos. Esto se debe a que, según los expertos "un huracán (tifón
o ciclón tropical) es un fenómeno físico que ocurre en zonas tropicales porque se transfieren enormes cantidades de
energía desde el agua caliente del océano hacia la atmósfera". Esta energía en los océanos proviene de la contaminación y
cuando esto pasa, la naturaleza, para protegerse así misma del creciente efecto
invernadero, proporciona los huracanes, pues estos actúan como un sistema de enfriamiento del planeta y ayudan a regular la temperatura de la misma. Al ser vientos rápidos y fríos, al momento de pasar por los
océanos los enfría y los refresca
significativamente. También lee: Huracán Grace deja 20 mil hogares dañados en Puebla, se espera aumente el número de daños Y esto no es todo, los ciclones tropicales son
extremadamente eficientes en la producción de lluvia y, por lo tanto, también pueden ser eficientes para combatir la
sequía. Además, cuando los huracanes se mueven a través del océano,
los vientos y mareas que provocan, rompen los 'parches' de bacterias que flotan
en el agua, lo que combate el fenómeno
de la marea roja, el cual consiste en un conjunto de organismos que habitan
en el océano y tienen un efecto nocivo para el ecosistema marino a causa de las
toxinas que produce. Los vientos también pueden oxigenar las aguas superficiales
cercanas, lo que ayuda a devolver la
vida a las áreas donde hubo marea roja. Del mismo modo, a medida que los huracanes tocan tierra, su viento sopla esporas y semillas más allá
de dónde normalmente caerían. Este efecto puede verse a miles de kilómetros
tierra adentro a medida que las tormentas se alejan de la costa. Los nutrientes frescos y los sedimentos que traen las tormentas
pueden generar nuevos brotes de plantas, lo que más tarde puede conducir a un crecimiento en la fauna. Frecuentemente dispersan
el follaje de los árboles, lo que combate los incendios forestales. Por último, mantienen
llenas las presas y limpian ríos y arroyos.
Normalmente en México la temporada de ciclones es de mayo a noviembre y en promedio
llegan 27 ciclones al año. |