Las grandes compañías que alimentan el cambio climático

Compañías como Coca-Cola, PepsiCo y Nestlé están trabajando junto a la industria de los combustibles fósiles para expandir la producción de plástico

Coca-Cola, Nestlé y PepsiCo están propiciando la expansión de la producción de plástico y alimentando el cambio climático. Los empaques de plástico de un solo uso son motor clave en la expansión del sector y las grandes empresas de bienes de consumo están fracasando en reducirlos de manera importante.

Más del 99% del plástico es fabricado utilizando combustibles fósiles y  en cada etapa del ciclo de vida del plástico: extracción del gas y el petróleo, el refinado y la producción, su incineración y llegada a rellenos sanitarios, incluso al reciclarlo se emiten grandes cantidades de Gases de Efecto Invernadero (GEI).

Un informe publicado por Greenpeace, "En las entrañas de la emergencia climática: cómo las empresas de bienes de consumo están impulsando la expansión de los plásticos de las grandes petroleras", expone los vínculos comerciales entre las marcas más grandes del mundo y las compañías de combustibles fósiles, y la falta de transparencia en torno a las emisiones de los envases y empaques de plástico.


“A pesar de sus mejores esfuerzos para parecer amigables con el clima, compañías como Coca-Cola, PepsiCo y Nestlé están trabajando junto a la industria de los combustibles fósiles para expandir la producción de plástico, lo que podría poner al mundo en niveles de emisiones catastróficos. Las mismas marcas conocidas que están impulsando la crisis de la contaminación plástica están contribuyendo a alimentar la crisis climática”, dijo Graham Forbes, líder del Proyecto Global de Plásticos de Greenpeace.

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Si bien la cadena de suministro de plásticos es opaca en gran parte, el informe identificó relaciones entre las nueve principales empresas de bienes de consumo investigadas y al menos una importante empresa de combustibles fósiles y / o petroquímica. Según el reporte, Coca-Cola, PepsiCo, Nestlé, Mondelēz, Danone, Unilever, Colgate Palmolive, Procter & Gamble y Mars compran envases de fabricantes suministrados con resina plástica o productos petroquímicos de empresas conocidas como ExxonMobil, Shell, Chevron Phillips, Ineos y Dow. Sin transparencia en torno a estas relaciones, las empresas de bienes de consumo pueden en gran medida eludir la responsabilidad por las violaciones ambientales o de derechos humanos cometidas por las empresas que suministran plástico para sus envases.

"La colusión entre las grandes marcas de bienes de consumo y las empresas de combustibles fósiles/petroquímicas resaltada en este informe es relevante para México porque refuerza el llamado hecho por Greenpeace México y la Alianza México sin Plástico (AMSP) a los legisladores a incluir la Responsabilidad Extendida de los Productores (REP) en la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR)." 

Se trata de una relación estrecha entre empresas que no sólo inundan los ecosistemas con residuos plásticos sino que además exacerban el cambio climático. 

"Por ello, ambos tipos de empresas deben asumir la responsabilidad que les corresponde en dejar de impulsar una economía fósil y en dejar atrás el uso de plásticos desechables a través de alternativas más sostenibles para las personas consumidoras, para lo cual la REP es esencial”, recalcó Ornela Garelli, especialista en Consumo responsable y  cambio climático de Greenpeace México .


“Está claro que muchas empresas de bienes de consumo quieren ocultar sus estrechas relaciones con las empresas petroquímicas y de combustibles fósiles, pero este informe revela hasta qué punto están trabajando para lograr objetivos comunes que contaminan el planeta y dañan a las comunidades de todo el mundo”, continuó Forbes. “Si estas empresas realmente se preocuparan por el medio ambiente, pondrían fin a estas alianzas y se alejarían de los plásticos de un solo uso de inmediato”.

Sin una acción urgente, la producción de plástico podría triplicarse para 2050, según estimaciones de la industria. Según estimaciones de CIEL, este crecimiento proyectado aumentaría las emisiones globales del ciclo de vida del plástico en más del 50 por ciento con respecto a los niveles de 2019 para 2030, lo que equivale a casi 300 centrales eléctricas de carbón. Este es el mismo período de tiempo en el que el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático advirtió que las emisiones causadas por los seres humanos deben caer casi un 50 por ciento para limitar el calentamiento a 1,5 ℃.


Las empresas deben eliminar gradualmente todos los plásticos de un solo uso y ser más transparentes sobre su huella plástica, incluida la huella climática de sus envases. Se insta a las empresas que han trabajado juntas para oponerse a legislaciones que restringirían los envases y empaques.

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