Considerado como el mayor productor de vino en nuestro país, el Valle de Guadalupe se ha convertido en un destino paradisíaco en donde las personas disfrutan de recorridos por viñedos y paisajes perfectos.

Lamentablemente, en los últimos años la región comenzó a sufrir una crisis que involucra problemas como el desabasto de agua, la urbanización rápida de la zona, el gandallismo por parte de grandes empresarios, corrupción y la indiferencia total por parte del gobierno municipal –principales culpables de la crisis-.

Y esto no es todo, recientemente se dio a conocer que la empresa APM Producciones, dedicada a la realización de eventos masivos, removió al menos 16 hectáreas para instalar el Foro APM, que tiene capacidad para 20 mil espectadores, lugar donde se presentaría el cantante Christian Nodal.

La obra fue denunciada por habitantes, productores de vino y organizaciones ambientalistas desde hace meses, pues la construcción de este foro solo empeoraría la crisis de recursos que se vive en el Valle de Guadalupe y la cual se ha agravado en los últimos años gracias al crecimiento del sector turístico que, sin regulación alguna por parte de las autoridades, ha contribuido al desastre.

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Aunado a esto, se dio a conocer que la compañía no tramitó los permisos de cambio de uso de suelo que establecen un ordenamiento ecológico, es decir, que el área debe ser protegida.

El reglamento de zonificación y usos de suelo para el Programa Sectorial del desarrollo urbano turístico de los valles vitivinícolas de Ensenada, región del vino, prohíbe la remoción de vegetación.

Tras estas declaraciones, la empresa APM Producciones aseguró contar con los permisos tanto para la construcción del foro, como para los eventos.

A pesar de ello, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) clausuraron el foro, para evitar que se continúe con la deforestación en la zona vitivinícola.

Desde el 2014, la popularidad del lugar se incrementó lo que provocó que empresarios construyeran hoteles, restaurantes, salones de fiestas, y cantinas, lo cual no sólo implicó la pérdida de ecosistemas, sino que generó problemas ambientales como la sobre-explotación de recursos que en el municipio de Ensenada, Baja California, son limitados.