El Relicario cumple hoy 23 años

** David Silveti, Jorge Gutiérrez y Vicente Ruiz fueron los primeros toreros en pisar la plaza poblana   Texto y fotos: Jaime OAXACA  HOY SE cumplen 23 años de haber sido inaugurada la plaza de toros El Relicario, un inmueble que José Ángel López Lima construyó y luego regaló a la afición de Puebla. Aquel sábado 19 de noviembre de 1988, a las 16:00 horas, actuaron David Silveti quien ya tenía ganado el sobrenombre de El Rey David, Jorge Gutiérrez y Vicente Ruiz El Soro, la tercia lidió un encierro chico de Reyes Huerta. El festejo del cumpleaños 23 será sin toros, todo indica que a la empresa actual no le pareció relevante la fecha; o ya perdió la ilusión de tener la plaza o tal vez por exigencias del gobierno, el caso es que la plaza permanecerá cerrada. ¡No habrá corrida! Pocos se acordarán del cumpleaños del coso. Juan Huerta, actual empresario, hace unos días me dijo que le iban a hacer unas modificaciones al inmueble, las cuales incluirían el cambio del techo, que la plaza quedará lista a mediados de diciembre. Es evidente que dichas remodelaciones bien pudieron hacerse después del 19 de noviembre para que una fecha tan importante no quedara en el olvido. Ignoro si el gobierno estatal dio órdenes de que ya se remodelara la plaza para que luzca bonita y perfumada para el próximo 5 de mayo, aunque falten 168 días. El gobierno realmente no se aflige por la fiesta de los toros, licitó el coso con unas exigencias absurdas; sólo son los administradores aunque se sienten los dueños de El Relicario -y de todo Puebla- pero, por ejemplo, no se les ocurrió poner una báscula o techar las corraletas para que los toros puedan descansar sin que les llueva. El Relicario pasa por un mal momento. La generalidad de su público cada vez se interesa menos en la fiesta como tal, le gustan dos o tres nombres y asiste a verlos, festeja, aplaude se emborracha sin valorar lo que sucede en el ruedo, sin importarle el toro. Mientras suene la música y el torero dé un rodillazo, están felices. El Relicario Desde 1974, año en que fue derribado El Toreo de Puebla, que estuvo ubicado en la 9 poniente y 19 sur, la ciudad no tuvo una plaza fija, para las corridas de feria se rentaban plazas portátiles por empresarios efímeros que venían a ofrecer las corridas de mayo, más de una vez fue un espectáculo de escasa calidad. En 1986 Raúl Coca Ramos inauguró la plaza La Guadalupana donde hoy está El Relicario, durante dos años ofreció la feria de mayo, perdió dinero y prefirió vender aquella plaza portátil, misma que se trasladó a Morelia, lo que ahora es el Palacio del Arte. Para la feria de 1988 no había empresa taurina en la Angelópolis, el patronato de feria dijo no importarle porque ya tenían contratado un circo, así se las gastaban; fue entonces que Antonio Moreno Durán, presidente de la Asociación Taurina de Puebla, realizó las gestiones para que llegara a Puebla el empresario José Ángel López Lima. José Ángel rentó la plaza San Rafael propiedad de los Querencia, ofreció la feria con resultados artísticos y económicos exitosos, tanto que organizó una novillada extra, llenándose otra vez el coso. El lleno de esa novillada fue el detonante para que surgiera la idea de construir una plaza fija en Puebla. La construcción El 18 de agosto de 1988 se colocó la primera piedra para la construcción de lo que sería la plaza de toros El Relicario. Durante los siguientes 92 días se trabajó a marchas forzadas, los responsables de la obra fueron los arquitectos Gilberto de Yta y Abel Aguirre. En cuanto la plaza estuvo terminada sufrió muchas críticas, los boquiflojos aseguraban que harían una mejor. Han transcurrido 23 años y se siguen peleando por ella. El nombre Se puso a concurso el nombre del coso. Angelópolis, sugirieron algunos, porque se relaciona con Puebla y dentro de la palabra existen algunas sílabas del nombre de Ángel, López Lima. El Toreo de Puebla o El Nuevo Toreo de Puebla, para revivir el nombre del coso derribado 15 años antes. De todas las propuestas la empresa se decidió por El Relicario, además ya tenía su pasodoble. Desde el 16 de septiembre de 2000, se llama El Relicario Joselito Huerta. La inauguración El sábado 19 de noviembre de 1988 a las 16:00 horas salieron por el patio de cuadrillas autos descubiertos con manolas sentadas en los cofres arrojando claveles al tendido. En la puerta de cuadrillas se colocó el listón para que fuera cortado simbólicamente, al matador Luis Castro El Soldado correspondió el honor. En seguida aparecieron los diestros: David Silveti de verde y oro, Jorge Gutiérrez de azul con bordados oro y el español Vicente Ruiz El Soro de negro y oro. Después del paseíllo José Ángel fue sacado al tercio a recibir la ovación del público que abarrotaba los tendidos. Fundador se llamó el toro que abrió plaza y estaba marcado con el número 96. Silveti le cortó la oreja a cada uno de sus dos enemigos, Jorge le echó voluntad a los dos de su lote y al de regalo, El Soro estuvo sensacional con las banderillas. Presidió el festejo Gonzalo Macías Galaviz, llevando al güero Armando Zeleny (qepd) de asesor, ambos ya fallecidos. Fernando García fungió como juez de callejón, el veterinario fue Benjamín Calva Rodríguez; Jaime Paredes Ugarte fue el médico de plaza; el alguacilillo José Luis Quintero; el servicio de plaza y monosabios estuvo a cargo de Francisco Peralta El Pera. José Ortega Pepito, también ya fallecido, mostró a la gente los nombres de los toros. Ángel Devo ejecutó el primer puyazo y Sergio Lozornio clavó el primer par de banderillas. Los otros seis toros se llamaron: Poblano No. 92, Cochero fue el 50, Toda una Vida el 90, Inolvidable No. 365, Aquel Señor el 97, y el 346 -el de regalo- se llamó Pistachero.     DATOS: La primera cornada la recibió Manuel Lima el 29 de abril de 1989; lo hirió un toro de Torrecilla. El primer rabo lo cortó Alberto Ortega el 13 de mayo de 1989, al toro Flamenco de Huichapan. El primer rejoneador en actuar fue Carlos Arruza hijo, el 6 de mayo de 1989. La primera novillada se efectúo el 25 de diciembre de 1988. Julio Sánchez, Rafael Ortega, Marco Antonio Camacho, Hugo García Méndez, Saúl Acevedo y Ángel García El Chaval. Con novillos de Rancho Seco. La primera oreja a un novillo la cortó Hugo García Méndez. El primer festejo nocturno fue una novillada el 9 de septiembre de 1989; torearon Alfredo Lomelí, Marco Antonio Camacho y Arturo Gilio. El primer toro lo indultó el juez Víctor Muñoz Alcántara; fue Campanillero de Xajay, el 1 de enero de 1989 EMPRESARIOS DE EL RELICARIO José Ángel López Lima: Noviembre de 1988 a noviembre de 1995. José Ángel López Lima y Espectáculos de México (DEMSA): Noviembre de 1995 a noviembre 1996. Espectáculos "El Relicario": Diciembre 1996 a diciembre 1997. Alberto Ventosa: Mayo de 1998 a junio de 1999. Manolo Tirado: Octubre 1999 a mayo 2000. José Ángel López Lima: Septiembre de 2000, hasta enero de 2005. En 2001 se techó. Pepe Huerta: La denigración de la plaza, de mayo de 2005 a enero de 2011. Juan Huerta: De febrero a septiembre de este año; soltada con gotero. Juan Huerta: Actual empresario; de septiembre 2011 a agosto 31 de 2012.
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