Confirman su candidatura
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** Tigres goleó y calificó a semifinales, donde enfrentará a Querétaro Agencia El Universal 
MONTERREY, NL.- Por fin los Tigres logran expulsar, mediante un efectivo exorcismo, a los “fantasmas” del pasado. En dos ocasiones, en las finales del Invierno 2001 y el Apertura 2003, los Tuzos del Pachuca frustraron el anhelado título a la causa regiomontana. Hoy, por adelantado, han eliminado al enemigo que evitó la coronación norteña hace una década. El paseo, en el congelado “Volcán” universitario, incluye lujosos recortes, maniobras fantásticas y sonrisas dispersas por todos lados. Lucas Lobos, el hombre del talento, se combina con Damián Álvarez para rubricar un imponente 3-0 (4-0 global) que apaga a los tímidos hidalguenses, sin aliento para incomodar a la fiera. Pronto, sobre el minuto 10, Lobos cobra un corner por la punta izquierda y Manuel Viniegra sorprende a la zaga para cabecear de frente y clavar el esférico a la derecha de Carlos Velázquez, inmóvil en la acción. En respuesta, seis minutos después, Elías Hernández ensaya un tiro de media distancia que Enrique Palos desvía a su derecha para responderle a la tribuna, que lo adora. Único destello de rebeldía de los visitantes. En adelante viene la faena. Lucas Lobos, encendido, cruza el área de derecha a izquierda, mediante un cambio de velocidad, y tras llevarse a medio mundo, saca un tiro cruzado, que le hace el túnel trágico a Segundo Castillo, antes de visitar las redes. Esto al minuto 26. Damián Álvarez se sublima. En un palmo de terreno elude a Héctor Herrera, le aplica la misma al portero Velázquez y sin ángulo de tiro la empuja, al 35, para pintarle la cara a los hidalguenses, lo cual confirma con su festejo. Para colmo, Héctor Herrera se gana la roja, tras jalonear a Viniegra en medio campo. La expulsión, en el minuto 61, deja más desorientado al sumiso adversario, ya de por sí ahogado tras el baile del lapso inicial. En nada afecta a Tigres la ausencia del suspendido Carlos Salcido. Ahí, en la contención, emplea a Manuel Viniegra y alinea a Jesús Dueñas para actuar como volante por izquierda. La fórmula premia a Viniegra, autor del primer gol del juego en acción a balón parado, y permite un trámite sencillo. El complemento, ya con los Tuzos liquidados, lo cumplen los felinos sin emplearse a fondo.
MONTERREY, NL.- Por fin los Tigres logran expulsar, mediante un efectivo exorcismo, a los “fantasmas” del pasado. En dos ocasiones, en las finales del Invierno 2001 y el Apertura 2003, los Tuzos del Pachuca frustraron el anhelado título a la causa regiomontana. Hoy, por adelantado, han eliminado al enemigo que evitó la coronación norteña hace una década. El paseo, en el congelado “Volcán” universitario, incluye lujosos recortes, maniobras fantásticas y sonrisas dispersas por todos lados. Lucas Lobos, el hombre del talento, se combina con Damián Álvarez para rubricar un imponente 3-0 (4-0 global) que apaga a los tímidos hidalguenses, sin aliento para incomodar a la fiera. Pronto, sobre el minuto 10, Lobos cobra un corner por la punta izquierda y Manuel Viniegra sorprende a la zaga para cabecear de frente y clavar el esférico a la derecha de Carlos Velázquez, inmóvil en la acción. En respuesta, seis minutos después, Elías Hernández ensaya un tiro de media distancia que Enrique Palos desvía a su derecha para responderle a la tribuna, que lo adora. Único destello de rebeldía de los visitantes. En adelante viene la faena. Lucas Lobos, encendido, cruza el área de derecha a izquierda, mediante un cambio de velocidad, y tras llevarse a medio mundo, saca un tiro cruzado, que le hace el túnel trágico a Segundo Castillo, antes de visitar las redes. Esto al minuto 26. Damián Álvarez se sublima. En un palmo de terreno elude a Héctor Herrera, le aplica la misma al portero Velázquez y sin ángulo de tiro la empuja, al 35, para pintarle la cara a los hidalguenses, lo cual confirma con su festejo. Para colmo, Héctor Herrera se gana la roja, tras jalonear a Viniegra en medio campo. La expulsión, en el minuto 61, deja más desorientado al sumiso adversario, ya de por sí ahogado tras el baile del lapso inicial. En nada afecta a Tigres la ausencia del suspendido Carlos Salcido. Ahí, en la contención, emplea a Manuel Viniegra y alinea a Jesús Dueñas para actuar como volante por izquierda. La fórmula premia a Viniegra, autor del primer gol del juego en acción a balón parado, y permite un trámite sencillo. El complemento, ya con los Tuzos liquidados, lo cumplen los felinos sin emplearse a fondo. 
