Carlos ROCHA Dos titanes de la lucha libre, Rush y Último Guerrero saldaron sus cuentas la noche de ayer en la Arena Puebla. Ambos gladiadores se traían ganas desde inicios del año, pero quedó claro quién es hoy por hoy el mejor; Guerrero se llevó el encuentro, pero con una maña que no vio el réferi. Estos dos grandes del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) tuvieron enfrentamientos, pero en modalidad de equipos, hasta que la semana pasada se concretó el reto personal. Fue así que desde la presentación, el Toro Blanco Rush no permitió la marcha de Guerrero por el pasillo de las estrellas al recibirlo con patadas voladoras. Durante toda la primera parte, Rush atizó contra el consolidado Guerrero, quien, pese a tener la preferencia del público, fue vencido en la primera caída. Sin embargo la ovación no se detuvo y Guerrero se llevó la segunda caída al rendir en el centro del cuadrilátero al Toro Blanco con una llave de rana invertida. A partir de entonces, Último Guerrero se enrachó y en gran parte del tercer episodio estuvo encima de Rush e incluso intento hacerlo rendir en un par de ocasiones, pero el conteo sobre la lona no llegó a los tres golpes, pues el Toro Blanco se repuso al instante. En un desesperado intento, El Ingobernable quiso someter a Guerrero pero fue inútil, pues en la intentona, Rush aventó al luchador de otro nivel contra el réferi, quien quedó inconsciente en una esquina. La situación fue aprovechada por Guerrero y golpeó en las partes nobles a Rush para hacerlo rendir y el árbitro de la contienda llegó para ratificarlo. Una guerra civil ruda Antes del combate estelar, se vieron las caras dos tercias de rudos bien consolidados en el CMLL. Por una parte estuvieron Rey Escorpión y Felino, acompañados por Cavernario; mientras que la otra esquina ruda fue territorio del equipo TGR: Terrible, Rey Bucanero y Vangelis. Los TGR se presentaron con un buen arranque con el que definieron la primera caída de muy rápido. Para la segunda caída el bando rudo encabezado por Cavernario se repuso; Tiger, el luchador más rápido del Consejo, se afianzó con ayuda de Escorpión y rindieron en el centro del encordado a sus rivales. Para el desenlace de la batalla, ambas escuadras mostraron su mejor nivel. Cavernario arengó a su veterana escuadra en un frente contra los TGR. Fue así que Tiger rindió a Vangelis; sin embargo, éste fue abatido por Terrible; el encuentro estaba en su apogeo cuando sin mayor motivo, el réferi Tirantes decretó un empate. La decisión sorprendió al público y a los propios luchadores que sin dudar se retaron a una batalla por la cabellera. Pese a ello, Tiger de manera oportuna les recordó a los TGR que él todavía no está en condiciones de apostar la cabellera, pues apenas la perdió en su último reto de principios de año. |