Agencia El Universal “Dejemos a un lado los cinturones y hay que pelear por el honor. En este deporte no le temo miedo a nadie”, lanzó un deshinibido Saúl Canelo Álvarez (47-1-1, 33 KO) a su potencial rival kazajo GennadyGolovkin. Eufórico, y tras vencer por soberbio nocaut al británico Amir Khan (31-4, 19 KO) en el sexto round, retó a Golovkin en la pelea que todo mundo pide. “Yo lo invité a subir al ring para decirle estas cosas. Por mí, en este momento nos ponemos a pelear”, agregó el tapatío ante la sonrisa de satisfacción de GGG que siente cerca su duelo ante Canelo. Este arrebató sucedió luego de resolver con un volado de izquierda a un escurridizo crucigrama llamado Amir Khan y retener su cinturón absoluto medio del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). El británico estaba realizando una pelea perfecta en lo que fue la inauguración para el boxeo del T-Mobile Arena de Las Vegas, la que promete ser la nueva catedral del boxeo mundial. King buscaba, entraba, salía, conectaba y dominaba las tarjetas. Khan planteó el combate a la reversa. Dejó su gran cantidad de golpes por un boxeo de contragolpe, que buscó conectar cuando Canelo bajaba la guardia. Álvarez fue el que tuvo que ir a la caza de su adversario a lo largo del ring. Esta estrategia propuesta por el británico tuvo buenos dividendos para su esquina en el inicio de la pelea. El mexicano buscaba conectar a Khan con potencia, pero este se mostraba muy escurridizo, con base a sus piernas. Para el cuarto round, Amir se animó a dar unos pasos hacia adelante. Hasta ese momento, Canelo logró conectarlo con dureza, pero seguía sin poder lograr sus intercambios de castigos con solidez. Así llegó el soberbio nocaut a los 2 minutos, 37 segundos del sexto. Apenas su segundo gran golpe en la pelea, pero suficiente para desconectar a un rival que al final pago factura en su osadía de subir dos divisiones. Golovkin espera en el horizonte. Promete ser diferente. |