Mariano del Castillo, joven promesa del kartismo poblano

El piloto poblano se esfuerza por consagrarse entre los mejores corredores del mundo, sin importar la falta de apoyos

Ante las adversidades tanto económicas como académicas, se mantiene vigente el sueño de Mariano del Castillo, piloto poblano, de consagrarse entre los mejores corredores del mundo, pese a que los apoyos sean escasos, a la par que el tiempo entre su carrera deportiva con su preparación estudiantil duplique el esfuerzo.

La joven promesa del kartismo poblano de 17 años recordó con El Popular, diario imparcial de Puebla, que desde su infancia se enamoró de la velocidad, guiado por su padre, con quien disfrutaba de los principales espectáculos del deporte motor del mundo, al mismo tiempo que nacía su pasión por las pistas mexicanas.

Entre la timidez de la infancia supo que no quería desempeñarse en ninguna otra disciplina que no estuviera a la altura de la sofisticación de la Fórmula Uno, que parecía un sueño lejano, pero su familia no dejó de impulsar sus metas, hasta ayudarlo a involucrarse en los karts.

La primera experiencia frente al volante ocurrió hace tres años, cuando el desconocimiento se mantenía en su manera de dominar los circuitos, pero le resultó increíble que su debut se diera en el campeonato nacional de la especialidad, donde quedó de último en la primera jornada, por una desventaja de una vuelta.

Castillo sintió que ese desafortunado intento en la pista le demostró que tal vez no era capaz de afrontar la meta que se trazó desde niño, pero su padre le dio una plática en la que le recordó que las grandes leyendas no surgen por errores de novato, sino que se erigen a través de la experiencia.

En medio del temor de no ser un digno representante en el kartismo nacional, las palabras de su familia le ayudaron a no perder la esperanza de que su llegada a la pista se limitara en un esporádico episodio, sino que las pequeñas mejoras en sus marcas lo impulsaron a no detenerse para crecer en el deporte motor.

"Llegué a la primera carrera sin experiencia y todos los demás me pasaron por encima, porque eran pilotos que venían de correr de Europa, que tenían el mejor nivel de México, una niña que te corría el Campeonato Mundial; o sea, eran pilotos de altísimo nivel, que bueno sí se me complicó un poco", mencionó.

Durante ese primer año, rodeado de errores y aciertos, ocurrió una de las experiencias más valiosas en su corta trayectoria, a través de un bien logrado quinto puesto en el certamen nacional que sucedió en el mismo día que el cumpleaños de su madre, lo que reafirmó su convicción.

Aunque las experiencias positivas se mantuvieron vigentes, fue a partir de la desgracia cuando se dio cuenta de que quería dedicar a correr, pues en su primer choque no se achicó a las circunstancias, sino que aprendió a dominar la situación, poniéndose de pie, con el firme objetivo de querer sobresalir en la especialidad.

La falta de apoyos no detuvo el sueño

La razón por la que su debut ocurrió hace tres años se atribuyó a que el sueño de correr siempre estuvo vigente en cada una de sus etapas de vida, pero el principal impedimento radicó en el dinero que se requería para emprender el proyecto, hasta que Flavio Abed apostó por su talento, ayudándolo a iniciarse.

Pese a que el apoyo de Abed duró la mitad del certamen, le facilitó trazarse un camino para buscar oportunidades más grandes, a través de patrocinadores que no dejaron de confiar en sus habilidades al frente del volante, con las que espera puedan llevarlo a comenzar su trayectoria en Fórmula 4.

Puntualizó que en algún punto de su carrera solicitó el apoyo de la Secretaría de Turismo (Sectur), pero no se concretaron, dejándolo con una sensación de falta de respaldo del sector público para que se den cuenta que el automovilismo es un deporte en ascenso en México, pero sólo requiere mayores incentivos.

"Creo que (el kartismo) es el deporte que más apoyo necesita, reconozco que hay otros deportistas que también necesitan muchísimo apoyo, pero, por el hecho de que no sólo compites tú, sino que lo haces con una máquina y esa máquina es específica y necesita muchas piezas, creo que se vuelve más caro", consideró.

De acuerdo con una solicitud de acceso a la información respondida por la Secretaría de Educación Pública (SEP) de Puebla a esta casa editorial, durante la administración de Rafael Moreno Valle al frente del gobierno estatal el kartismo sólo resultó prioritario entre 2012 y 2014, cuando liberaron una beca deportiva por año.

Las becas deportivas del kartismo, desde su aparición, comenzaron a irse a la baja en cantidad de ingresos liberados año tras año, pues en 2012 se entregó un pago de 9 mil pesos a un solo piloto, pero para 2014 la cifra decreció a un ingreso de mil 600 pesos; es decir, los apoyos financieros disminuyeron en más del 82 por ciento.

Las metas del futuro

Para lo que resta de la segunda mitad del año, Mariano del Castillo tiene el claro objetivo de consagrarse como el monarca del circuito estatal del kartismo y mantiene pláticas para iniciarse en la Fórmula 4, las cuales esperan que proliferen para cumplir con su prioridad deportiva.

"No es que no me asuste (llegar a F4), pero llevó dos años buscándolo, claro que sientes descontrol, porque no depende de ti y se siente un poco raro ver a los demás que sí pueden y están ahí, pero creo que sí lo tomas con calma y sí buscas y no te desesperas, lo puedes encontrar", confesó.

El piloto poblano se mantiene consciente de que el deporte motor no es la única alternativa para su futuro, por lo que en su segundo año de preparatoria ya tiene entres sus planes profesionales estudiar ingeniera en deporte motor en Inglaterra, arquitectura o diseño automotriz.

Además de sus aspiraciones profesionales, a nivel deportivo tampoco quiere alejarse de la velocidad, por lo que quiere emprender su propia escuela, con la que pueda orientar a los más jóvenes que quieran comenzar en el kartismo y así eviten buena parte de los tropiezos a los se enfrentó durante sus inicios.