Pilotos poblanos en pleno ascenso

Édgar Daniel Tovar y Joaquín Martínez con 25 y 15 años respectivamente se encuentran dentro de los mejores 5 conductores

Su vida son las motos, su sueño ser los mejores del país, Edgar Daniel Tovar y Joaquín Martínez son dos poblanos que forman parte del equipo oficial de motocross en el estado, uno de ellos está dentro del ranking de los 5 mejores corredores de México.

Joaquín tiene 15 años, a los 3 años tuvo su primer moto KTM 50, pero sus padres lo dejaron entrenar de manera oficial hasta los 7 años. Su padre que solía correr lo llevaba a las carreras, ahí empezó su amor por la velocidad y su interés por "rebasar la velocidad del viento".

Su corazón late más de lo normal cuando corre, la adrenalina lo llena de felicidad, los nervios lo impulsan a ser el mejor y el apoyo de sus padres lo motivan a ser precavido. "Es un deporte arriesgado, por lo tanto le debes de tener respeto", dijo.

Ha sido todo un reto combinar su pasión por la velocidad y seguir su vida normal de adolescente, no obstante, también sus compañeros han sido una motivación, lo admiran por ser un joven que busca actividades extremas pero al mismo tiempo va a la escuela y hace actividades cotidianas.

 

"Es padre pero también difícil, por ejemplo cuando corro mi mamá se pone muy nerviosa, pero están orgullosos porque este año voy a ser un piloto de la agencia de motos KTM, incluso manejaré una KTM 18", explicó.

 

Es la primera vez que Joaquín va ser piloto de un equipo, aceptó estar nervioso e inspirado, pues a pesar de que se rompió la clavícula el año pasado, las personalidades del motocross se están fijando en él. "Mi meta es correr en Estados Unidos y ser campeón nacional", compartió.

Por su parte, Edgar Daniel empezó a correr a los 5 años, actualmente tiene 25. Toda su familia se ha dedicado al motocross, así que su afición ha pasado de generación en generación.

 

 

Al día de hoy está renqueado como el quinto lugar nacional en la categoría MX1 del motocross, está posición lo tiene contento, más no satisfecho pues su meta es ser el número uno en el país.

"Ha sido largo el proceso no es algo que se haga de la noche a la mañana pero ya llevo años arriba de una moto y aunque me ha costado sé que puedo llegar a más", expresó.

 

En todo este tiempo ha acumulado 15 fracturas, y cuando tenía 14 años se perforó un riñón, sin embargo, nunca ha pasado por su cabeza dejar este deporte, es más grande su pasión; las motos ya no són sólo un vehículo es su estilo de vida.

"Es un deporte riesgoso, pero es familiar, une amigos, y te hace una persona de bien, responsable y con metas que es lo que todos debemos buscar en la vida", concluyó.

 

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