El sello mexicano del Atlético de Madrid
La historia de aquellos mexicanos que lograron romper las fronteras por su talento. Todo inició con Hugo Sánchez
Todo empezó en 1981, cuando Hugo Sánchez hizo las maletas en la capital mexicana para incorporarse al Atlético de Madrid. El delantero tenía 23 años, una gran habilidad, atrevimiento y unas ganas locas por meter goles en La Liga española. El Manito, como así le llamaban, o Hugol, jugó cuatro temporadas en el equipo rojiblanco, consiguiendo su primer pichichi, trofeo al máximo goleador, y una Copa del Rey. Su posterior paso al equipo vecino de la capital española, Real Madrid, terminó de consagrar a uno de los mejores delanteros del mundo, consiguiendo con la camiseta madridista cinco títulos de liga y cuatro de máximo goleador. El siguiente mexicano en vestir la casaca rojiblanca fue el también delantero Luis García quien, como Hugo Sánchez, llegó procedente del Pumas de la UNAM. Luis García, que declaró al poco de llegar a Madrid que “no quiero que me comparen con Hugo Sánchez”, permaneció dos temporadas en el Atlético de Madrid, 1992-93 y 1993-94, antes de jugar varios meses en la Real Sociedad y regresar a México. Javier Aguirre no llegó a jugar en el Atlético de Madrid, sí lo hizo en Osasuna en la liga española, pero mantiene un vínculo rojiblanco de su etapa como entrenador. El Vasco permaneció en el banquillo rojiblanco durante dos temporadas y media (entre julio de 2006 y febrero de 2009) , alcanzando un puesto en la Liga de Campeones y, en contraposición, fue destituido por primera vez en su carrera como técnico profesional. En esta etapa, Javier Aguirre estuvo acompañado de Ignacio Ambriz, su ayudante en el banquillo, actualmente entrenador del club León, mientras que Aguirre fue destituido el pasado 7 de julio de su cargo de seleccionador de Egipto. Volviendo al capítulo de futbolistas, el Atlético de Madrid se hizo con los servicios del delantero Raúl Jiménez, procedente del América, en agosto de 2014 quien, como Hugo Sánchez, llegó a España con 23 años. Jiménez, actualmente en el Wolverhampton de la liga inglesa, ha sido elegido el mejor jugador de la última Copa Oro, que ha ganado la selección mexicana. La llegada de Jiménez a Madrid, en 2014, coincidió con la de Javier Hernández Chicharito al Real Madrid; y de Javier Aquino al Rayo Vallecano, los tres clásicos equipos de la capital española. Casualmente, los tres permanecieron sólo una temporada en los clubes madrileños, saliendo a equipos de otras ligas. Herrera y Charlyn, los últimos en llegar Por aquellas fechas, el centrocampista Héctor Herrera ya despuntaba en el Oporto portugués, club al que llegó en 2013. Cinco años después, el mexicano de 29 años se ha comprometido con los rojiblancos por tres temporadas. “Me siento muy feliz por llegar a un club histórico como es el Atlético de Madrid,” fueron sus primeras palabras tras estampar la firma con su nuevo club, en el que portará el número 16. A la par de Herrera, el equipo femenino del Atlético de Madrid, actual campeón de la Liga Iberdrola, presentaba a la delantera Charlyn Corral, de 27 años, que en las últimas cuatro temporadas ha jugado en el Levante de la liga española. También puedes leer: Deja Sánchez Solá banquillo del Club Puebla
Charlyn Corral fue máxima goleadora del campeonato español en la temporada 2017/18, quedando en segundo lugar, con 20 goles, en el último ejercicio. “Es un gran reto y una gran responsabilidad y siento muchas emociones, he llegado a un buen lugar y no tengo duda de que seré feliz aquí,” expresaba Corral en su presentación. La nueva mexicana del Atlético de Madrid coincidirá con su compatriota Kenti Robles, lateral derecha con la que convive en la selección mexicana. Robles, de 28 años, va a iniciar su quinta temporada con las rojiblancas, con las que ha ganado tres ligas y una Copa de la Reina. Tanto Corral como Robles participaron en los Juegos Panamericanos 2019 en Lima. El sello mexicano del Atlético de Madrid no termina aquí. Los madrileños mantienen una franquicia, desde 2017, con el Atlético San Luis Potosí, equipo que ha ascendido a la primera división mexicana. Recientemente estos dos “clubes hermanos” disputaron un partido amistoso en San Luis de Potosí para afianzar unos vínculos que unen a los rojiblancos con el futbol mexicano desde los tiempos de Hugo Sánchez.
|