El panameño Johan Camargo, Juan Lagares y el mexicano Luis Juárez conectaron jonrones en la corona de las Águilas Cibaeñas que superaron este lunes por 7-4 en la final a los Gigantes del Cibao, en el estadio Julián Javier, de San Francisco de Macorís (noreste), del torneo de béisbol dominicano.

Jonathan Villar aportó dos vueltas con doblete, y Ramón Torres agregó otra para completar la ofensiva de las plumíferas (4-3).

En su final número 40, las cuyayas lograron el campeonato 22, empatando con los Tigres del Licey como los equipos con mayor cantidad, siendo el segundo conjunto que regresa de un déficit 1-3; los Leones del Escogido consiguieron la hazaña ante las Estrellas Orientales en la estación de 1987-1988 al mejor en siete partidos.

Las Águilas avanzaron en el tercero con cuadrangular de Camargo al norteamericano Chris Ellis.

Los potros (3-4) reaccionaron en el quinto ante el panameño Andy Otero; sencillo de Abiatal Avelino, hit de José Sirí en toque por tercera; Ronald Guzmán empató la pizarra con imparable, y Kelvin Gutiérrez impulsó con elevado de sacrificio.

Lagares sacó la pelota del parque en el sexto para igualar el marcador.

Juárez devolvió la ventaja a los amarillos con jonrón en el séptimo al derrotado Wily Peralta (0-1); Francisco Peña recibió transferencia.

Miguel del Pozo subió al montículo por Peralta, y Camargo lo recibió con doblete; boleto intencional a Juan Carlos Pérez para llenar las almohadillas, y Villar conectó doble remolcador de dos, seguido por incogible productor de Torres; Gabriel Arias sustituyó a Del Pozo, y Lagares empujó otra con rodado.

Los nordestanos descontaron en el octavo, cuando Gutiérrez despachó vuelacercas a Gregory Soto, y añadieron otra en el noveno contra Neftalí Féliz con triple de Avelino, y doble de Sirí.

Otero trabajó 4.0 episodios, de seis hits, par de vueltas, dos caminatas y cuatro ponches, mientras que Ellis permitió dos anotaciones, igual cifra de imparables en 6.0 capítulos, un pasaporte y abanicó dos.

El relevista Luis Castillo (2-0) se llevó la victoria al cubrir 2.0 actos en blanco con cuatro ponches.

Lagares fue seleccionado como el “Jugador Más Valioso” de la serie final al batear .379, tres cuadrangulares y 10 impulsadas.

“Gracias a Dios por mantenerme saludable el año completo. Vine a darlo todo, y logramos el objetivo (ganar)”, expresó Lagares.

El experimentado dirigente Félix Fermín registró su undécima final, 10 con las Águilas y una con los Gigantes, incrementando a seis el récord de más cetros, que no obtenía desde el torneo 2007-2008.

Para el capataz rival, el colombiano Luis “Pipe” Urueta, intentó por tercera vez levantar el trofeo, estando al mando, después de dos subcampeonatos como manejador de los Tigres (2017-2018 y 2019-2020), franquicia en la que también se desempeñó como gerente general, asistente del mánager y coach de la tercera base.

Urueta se ausentó varios días debido a afecciones de salud por intoxicación y coronavirus. El domínico-cubano Brayan Peña fungió como dirigente interino.

A los Gigantes se les escapó la oportunidad de su segundo éxito, pues lo habían conquistado en la campaña 2014-2015, bajo las riendas de Audo Vicente.

Por los ganadores, Camargo, de 4-2, H4, doble, empujada, dos anotadas; Juárez, de 4-2, vuelacercas, impulsada, anotada; Lagares, de 4-1, jonrón, dos remolcadas, anotada; Villar, de 4-1, doble, dos producidas, anotada; Torres, de 5-1, empujada, Pérez y Francisco Peña, sendas anotadas.