Lucía Serrano entre líneas, detalles y tinta

Plasma expresiones a través del arte corporal

Después de una importante búsqueda de identidad y teniendo como base la ilustración, Lucía Serrano tomó la importante decisión de convertirse en tatuadora profesional. Comenzando por tatuarse ella misma, conociendo el dolor y saber que tendría tinta en su piel para siempre, fue así como inició su carrera, "desde que compré la máquina, prácticamente nunca he dejado de tatuar", expresó.

Estudiante de la licenciatura en Artes Plásticas, contó que el ambiente del tatuaje es muy competitivo y machista, pues existe mucha rivalidad e incluso la pueden llegar a ver como una persona incapaz de realizar el arte corporal por el hecho de ser mujer, expresó que se ha tenido que enfrentar con diversos obstáculos para realizar su trabajo, especialmente por parte de los hombres que se dedican a lo mismo.

 

Identidad y familia

Con padres médicos, el primer obstáculo con el que se enfrentó fue el que sus padres temían en que contrajera alguna enfermedad de transmisión sanguínea, su mamá no estuvo de acuerdo desde sus inicios, pero siempre respetó su trabajo, a su padre le gustan los tatuajes pero su temor eran las enfermedades, por lo que para ella es esencial monitorearse y realizarse los estudios necesarios, pues lo considera una responsabilidad con ella y para quienes confían en su trabajo.

Lucía, considera que la práctica la ha hecho evolucionar, conocer el verdadero significado de realizar esta profesión ha sido un reto pero considera que la mayoría de las personas e incluso tatuadores lo califican como una moda y un negocio, "el problema no es que sea moda, es que al volverse una moda a veces se hacen las cosas mal, creen que tatuar es sencillo", comentó.

Expresó que para dedicarse a esto es necesario conocer acerca de este arte, su historia y origen, las personas en la actualidad siguen viendo mal el tatuaje por estar mal informados y considera que no se le da el debido respeto.

 

El estilo, primordial para Lucía

En cuanto a su estilo, Serrano nos comentó que le llaman la atención diversos tipos, pero que decidió enfocarse en el tatuaje de línea y puntillismo en blanco y negro, "considero que primero es necesario dominar uno para después realizar algún estilo diferente".

Para Lucía, los tatuajes identifican a las personas y considera que el tema se ha vuelto mucho más abierto, pues ha tenido la oportunidad de tatuar a mamás con sus hijas y personas de todas las edades, contó que la sociedad aún puede ser muy dura y mostrarse intolerante ante una persona que porta tatuajes, la discriminación está latente todavía pero piensa que poco a poco se eliminará por completo.

 

El tatuaje como estilo de vida

Para Lucía conocer a sus clientes es primordial, pues considera que es un momento íntimo en el que se comparten vibras, ya que al ocasionarles dolor ella experimenta las sensaciones a la par con la persona. "Me gusta conocer el por qué se tatúa y cómo me conocieron, las reacciones son muy interesantes, mi mayor satisfacción es saber que cumplí con la labor de dejarles algo importante y que llevarán toda la vida en su piel".

Explicó que es importante conocer el lugar en dónde se van a tatuar, quién lo va a hacer además de verificar que el material sea estéril, sin mencionar que es necesario conocer el portafolio del artista, es vital tener conciencia y entender que es algo que tendrán para toda la vida.

"Si quieren algo en la piel, no les recomiendo regatear, pues es el valor que le das al trabajo de quien realiza el tatuaje, es arte y deben respetar lo que cuesta e implica hacer esta labor".

 

Un tema de discriminación

La tatuadora comentó que en la actualidad es un tema de distinción, pues existen personas a las que no les agrada el arte corporal, pero que tampoco respetan el trabajo ni los gustos de las demás personas, "lo que se les pide sólo es respeto, al final no es su vida y nunca van a saber lo que es ser discriminado por ser alguien que ama su trabajo y que para aquella persona lo es todo".

Expresó que para aquellos que aún están indecisos en tener uno, les recomienda antes estar seguros de lo que implica tener un tatuaje, siempre perder el miedo a las cosas sin necesidad de revelarse, pero pensar que lo que ellos quieren es para su cuerpo y es un tipo de expresión, identidad y arte.

 

 

 ENTRETEXTOS

"Al momento de tatuar experimento miedo, debo estar concentrada pues al ocasionar dolor la relación cliente y tatuador se convierte en íntima".

Lucía Serrano

 

  • URL copiada al portapapeles