De sus 29 años de vida, lleva 14 trabajando en marketing y publicidad. Actualmente se desempeña como asesor de empresas en el área de comercialización y marketing digital. De manera más reciente, también da charlas y conferencias, e incluso ha incursionado en el mundo de las finanzas. Múltiples inquietudesEstudió arte dramático, pero dejó la carrera y empezó a trabajar en una compañía de teatro. Sin embargo, desde los 15 años entró al mundo de la publicidad junto a unos amigos que tenían una agencia donde durante cuatro años aprendió cómo editar video, hacer diseño y programar. Mientras trabajaba en la compañía de teatro, decidió estudiar mercadotecnia en línea para complementar lo que ya había aprendido en ese campo profesional y aun después de dejar la agencia, siguió dedicándose a eso pues empezaba a tener clientes que lo buscaban por su trabajo. Posteriormente también sintió interés por estudiar administración financiera. "Me gustaba, me llamaba la atención, pero no era como lo había concebido" y empezó a dedicar más tiempo a dar cursos y conferencias. En tiempos más recientes, al invertir en mercados financieros, ha tratado de retomar sus estudios relacionados con las finanzas. Construirse a sí mismo"El teatro me dejó muchas herramientas que todavía ocupo mucho. Sobre todo la parte escénica porque cuando descubrí que me gustaba dar conferencias y cursos, las herramientas de expresión corporal, de modulación de la voz y trabajo con el público me resultaron muy útiles y las conservé. Era muy tímido para hablar en público y el teatro me hizo un poquito más descarado." Además, ha procurado leer sobre el desarrollo de habilidades sociales y de negocios. Confiesa que le cuesta trabajo acercarse a las personas para conocerlas o entablar una amistad. "Pero si se trata de hacer networking, me siento como pez en el agua". No se siente muy cómodo hablando de su vida personal, pero cuando habla de negocios se desenvuelve de una manera muy diferente, como si interpretara un personaje basado en sí mismo, su branding personal. Para seguir creciendo, busca su mayor debilidad, se acerca a alguien a quien considera mejor que él (un coach) y trata de empaparse de su experiencia y consejos para desarrollar habilidades que siente que puede mejorar. En esta etapa de su vida ese proceso se centra en arreglar ciertos hábitos que tiene para ser más efectivo en todo lo que hace. "Hay momentos en que llego a un tope. Voy muy bien y de repente choco con una barrera que ya no me deja crecer, entonces trato de romper viejos hábitos y crear nuevos para poder pasar al siguiente nivel al que aspiro". Sacrificar para avanzarHay cosas que todo emprendedor debe sacrificar para alcanzar sus metas. En el caso de Jorge, una de ellas es su familia. "Hay veces que paso meses sin verlos porque siempre estoy de arriba para abajo pero de alguna manera ya se acostumbraron". También ha ido dejando de lado otras cosas que lo apasionaban mucho como el teatro o la música pero considera que lo que al principio duele es el desapego a ciertas cosas, y vale la pena si con ello se encuentras el propósito personal. "En mi caso he encontrado la satisfacción de sentirme útil y causar un impacto en la gente a través de los cursos, las conferencias y ahora en el proyecto que tengo de escribir un par de libros". Actualmente lo que más lo ocupa es desarrollar nuevos conocimientos, habilidades y perspectivas para enfrentar el miedo que llega a sentir de ser una estafa. "Hay quien me ha dicho que me ve como una persona exitosa, y a veces no creo ser tan bueno como la gente me percibe , pero si un poquito de lo que hago ayuda a los demás y yo puedo ser mejor persona, vale la pena tratar de ser extremadamente bueno en ello." Un día en la vidaUn día en la vida de Jorge Chávez es muy incierto. Procura llevar una agenda pero sabe que no se puede controlar todo lo que ocurre. Está consciente de que solo puede planear 60% de su día y el otro 40% se deja sorprender por las oportunidades que se le presentan. Se despierta entre las seis y las ocho de la mañana, hace ejercicio cada vez que le es posible, desayuna, se arregla, y revisa correos en el teléfono o la computadora; siempre tratando de priorizar los pendientes de su lista. Tanto en las mañanas como en las tardes suele tener reuniones y juntas, ya sea para cerrar un negocio, afinar detalles con el equipo o tratar algún asunto con los clientes. Los viajes de trabajo también ocupan gran parte de su tiempo. En sus ratos libres se sienta en algún café o restaurante, come algo rápido y termina sus pendientes en la computadora. Cuando llega la noche -entre las 9, 10 u 11-trabaja en reportes y presentaciones y si le da tiempo escribe un rato para avanzar en los proyectos de los libros. Por último, dedica un par de horas a los mercados financieros haciendo análisis técnicos, proyecciones e inversiones. Sólo entonces, entre las dos o tres de la madrugada, se acuesta a dormir. Barreras y logros"Un gran obstáculo para mí es la disciplina, me encanta iniciar proyectos nuevos pero me desespero mucho si se alarga y por eso me cuesta mucho trabajo terminar los proyectos." Jorge nunca ha logrado sentirse 100% satisfecho de sus proyectos; aunque éstos hayan salido muy bien, él siempre piensa en qué pudo ser mejor, pero esa hambre de crecer es fundamental en su vida y su carrera. "Creo que mi mayor logro ha sido impactar en personas más jóvenes que yo. Gente que se acerca y me dice que quiere ser como yo. Pero yo les digo que apunten más alto". ConsejosFinalmente, el consejo que deja a quienes, como él, quieren emprender, es aprender a incomodarse, pues solo así se logra crecer, porque la trampa más fuerte de ser emprendedor es caer en zona de confort, creer que ya se logró todo y perder el impulso inicial. "Mi mentalidad es más de nunca detenerse, porque el tiempo se va muy rápido y en realidad no sé cuántos años voy a durar. Por eso mejor me apuro. Quiero morirme y que por lo menos algo de lo que haya hecho perdure por generaciones". |