Misha Haba, sin miedo a arriesgarse
De madre mexicana y padre checo, Misha Haba estudió Filología en la República Checa
De madre mexicana y padre checo, Misha Haba estudió Filología en la República Checa, sin embargo, ella siempre tuvo la idea de dedicarse al maquillaje porque considera que a través de él se puede plasmar y reafirmar la personalidad de alguien. Su gusto por esa profesión empezó cuando, entre los 16 y los 17 años, acudía a clases en la escuela de Silvia Ojeda, donde conoció a la maquillista y empezó a tomar clases con ella. A partir de ese momento, le encantó y era una de sus principales motivaciones en esa etapa de su vida. En ese ramo, ha hecho de todo: producción de comerciales, participar en diversas fashion weeks, también tiene un canal de youtube donde hace tutoriales y actualmente se dedica de lleno al maquillaje social. Pero todo empezó de manera más formal cuando estaba estudiando en Praga y tuvo la oportunidad de participar en el Fashion Week, en 2010, trabajando con el diseñador Osmany Laffita. "Fue una gran experiencia pero a la vez creo que ha sido la peor. La gente se burlaba de mí, de mi maquillaje, de mi kit, porque era muy básico y me decían que no iba a llegar a ningún lado. Pero había personas que me buscaban para que las maquillara y por eso seguí". Cuando se graduó de la universidad y regresó a México, se marcó el objetivo de trabajar en M.A.C. donde estuvo trabajando casi tres años. Esta experiencia le ayudó en el aspecto de las certificaciones, el perfeccionamiento de la técnica y a desarrollar su lado más creativo y artístico, además de abrirle muchas otras puertas a nivel profesional. Sin embargo, consideró que era tiempo de continuar por su cuenta y decidió dedicarse de lleno a trabajar como freelance. Misha comparte su experiencia y resalta que desempeñar su profesión de manera independiente tiene sus pros y contras. "Tienes que moverte mucho por todos lados, pero sobre todo en redes sociales porque todo depende de ti, de qué tan activo y constante seas, porque si no te proyectas a través de las diferentes redes sociales, nadie te ve y nadie te busca." De igual modo, desde su punto de vista, para sobresalir y ser un buen maquillista, más allá de todas las herramientas y materiales, se necesita amabilidad, empatía y creatividad. "Lo más importante es tratar bien a las personas, saber sintonizar y entender sus necesidades para después poder plasmar algo y aplicarlo a través del maquillaje. Es algo que se trae dentro y, aunque suene cursi, es como un don." Por otra parte, en lo referente a su estilo, lo que considera que la identifica entre sus colegas, es ser arriesgada y el uso del color. "Siempre escucho lo que me piden las clientas, pero también trato de ofrecerles una opción diferente, transformar lo que quieren en algo más colorido que salga de lo rutinario. Y creo que por eso me siguen buscando, porque soy más atrevida". Entre las dificultades a las que se ha tenido que enfrentar ha estado no obsesionarse con la perfección al punto de frenarse al hacer algo. "El perfeccionismo a veces te llega a sabotear, porque a fin de cuentas nada sale perfecto". Y entre sus logros, considera que uno de los mayores es ser la persona que es hoy. Le gusta aprender, conocer a la gente del medio, adquirir nuevas técnicas y conocimientos. "Siempre he dicho que cuando dejas de aprender, te empiezas a enterrar como persona y ya no creces". Asimismo, en sus planes para el futuro próximo, aun cuando hay algunos de los que todavía no puede dar adelantos, le gustaría enfocarse en el contenido del canal de youtube, haciendo tutoriales y retos en los que sus seguidores aprendan a maquillarse con poco dinero. También le gustaría poder inspirar a las personas para que se animen a hacer algo sin necesidad de copiarle a alguien más. Para Misha, la industria de la moda en Puebla está creciendo mucho y es el estado con más actividad y futuro, sin tomar en cuenta la Ciudad de México y Guadalajara, que ya son sedes de muchos eventos del ambiente. De igual modo, considera que la gente tiene mayor apoyo gracias a que existen instituciones educativas enfocadas en la industria de la moda, lo que representa una gran ventaja. "Si te dedicas a esto, puedes ser tú mismo, puedes organizar tu tiempo, no casarte con una sola empresa, colaborar con diferentes personas y explorar diversos estilos que al final te aportan experiencias muy valiosas". Finalmente, a las y los jóvenes que ven una opción profesional en el mundo de la moda, y más específicamente en el maquillaje, les recomienda no tener miedo del qué dirán, arriesgarse a hacer lo que quieren y que se enfoquen en sus metas. "Lo único constante es el cambio y no hay que tener miedo de arriesgarse a hacer cosas nuevas, porque eso es lo que al final nos hace mejores personas". |