Comida molecular, descubre su textura

Antes era común que te sirvieran mucho de un platillo para saciarte, pero hubo chefs arriesgados que fueron más allá

Comida molecular, descubre su textura
Agencias | Comida molecular. Comida molecular, descubre su textura

La vecindad Podcast

Memorias del Crimen

¿Alguna vez imaginaste comer algo que no parecía ser lo que probaste. Pues esto es posible gracias a la química y sus procesos que se metieron hasta la cocina para crear la comida conceptual, que combina la química, la física y la biología para desarrollar nuevos platillos, los cuales han llegado a considerarse piezas de arte. A continuación te damos a conocer las características principales de este tipo de comida.

De lo bueno, poco

Antes era común que te sirvieran mucho de un platillo para saciarte, pero hubo chefs arriesgados que fueron más allá y buscaron con poco satisfacer tus sentidos; ésta es la característica principal de la comida molecular.

Siente la comida

Las texturas y colores de lo que se come son los elementos principales para que se haga una fiesta en tu boca. Esto se logra cambiando las técnicas de cocción y preparación de los alimentos.

Técnicas

El nitrógeno líquido, la utilización de la lecitina de soya o de un sifón, así como aplicar la deconstrucción (aislar los diversos ingredientes de un plato para luego reconstruirlo de manera inusual), son de las técnicas más usadas por los chefs. Usar estas técnicas causa gran asombro en los comensales.

Todo se transforma

Imagina presentar un ingrediente sólido en forma líquida o gaseosa, ésto es posible gracias a la magia de la cocina molecular, donde es muy frecuente ver espumas batidas, efervescencias, polvo, gel y esferas, ya que todos los ingredientes se transforman. Ejemplo: un huevo puede reconstruirse y hacerse simplemente polvo para un nuevo platillo.

Menos gasto de energía

Si cocemos una carne de manera tradicional gastamos recursos y tiempo; con las nuevas técnicas de cocción esto sólo es cuestión de minutos. Incluso también aplica en alimentos fríos como los helados, que antes consumían horas de trabajo y ahora con el nitrógeno líquido es cuestión de minutos.