Resurge el Pox

Un destilado de Chiapas para el mundo

Una de las delicias que la cultura maya nos heredó es el Pox, también conocido como Posh, aguardiente de maíz que actualmente llega a los mercados y las nuevas generaciones.

Origen

Esta bebida es tradicional de las comunidades tzotziles y tzeltales de los Altos de Chiapas. Actualmente hay varias marcas, pero todas tienen en común el lema de que ésta acerca los corazones; en San Juan Chamula lo beben en grupo, como símbolo de fraternidad o de acuerdo al final de un evento o reunión importante.

Preparación

Para esta bebida se necesita agua de manantial, un buen maíz, piloncillo, caña y trigo. Ingredientes que se mezclan, se dejan fermentar por una semana y luego se destilan para dar lugar al Pox. Su color es transparente, pero si se le añaden frutas o hierbas su tono varía dependiendo de ésas.

Grados de alcohol

Si quieres probar el Pox debes saber que hay de varias graduaciones, que van de 36 hasta 64 grados de alcohol. Esto depende del número de destilaciones que se realicen. El primer trago siempre será fuerte, pero en el segundo ya puedes disfrutar más el sabor.

Variedad

El Pox puede tomarse solo o combinado con alguna fruta (tamarindo, jamaica, membrillo, durazno, mango y ciruela); si es así está se deja reposar un año y al final se obtiene la famosa mistela, bebida muy popular entre los más jóvenes.

Un toque mágico

En rituales los sacerdotes solían usar esta bebida; quizás de ahí la idea de beberlo en nacimientos, bodas, carnavales y hasta rituales de sanación. En las comunidades el tomarlo es como expandir un puente entre el mundo material y espiritual. Es la bebida que aleja.

 

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