Ruth Díaz chef poblana

Demuestra que se puede

Ruth Díaz chef poblana
Vianey FONSECA | Ruth es chef y mamá exitosa Ruth Díaz chef poblana

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Es chef y madre de una niña. Ruth Díaz desde pequeña estuvo inmersa en la cocina gracias a su madre, quien le mostró todo un mundo de posibilidades a través de sus recetas, las cuales hacían que en cada temporada su familia se reuniera a cocinar y a disfrutar de los diferentes platillos que preparaban.

"Mi mamá dejó un recetario que era de mi abuela que está escrito en máquina de escribir; entonces es algo que va de generación en generación."

Lo que inspiró en su momento a su mamá a experimentar con la comida hizo en ella el mismo efecto, por lo que siguiendo estos pasos también ha cambiado algunas recetas. Al pasar toda su niñez y adolescencia residiendo en el Centro Histórico, sus platillos favoritos son las básicas como un taco de mercado que contiene ensalada de nopal, chicharrón, aguacate y queso fresco, o un tamal de dulce con mole.

Siempre unida a su familia decidió estudiar la carrera de gastronomía en Guadalajara, donde obtuvo experiencia y después de unos años regresó. Constantemente le ha gustado mostrar de dónde viene y por esta razón prefiere cocinar en su mayoría platillos poblanos. Menciona que "la cocina poblana es muy temporal, ya que depende de las frutas o estaciones. Pues los platillos más importantes son estacionales, como el chile en nogada."

Esto la llevó, en 2017, a recibir la invitación de Ciudad Délice Networks, de la que Puebla es partícipe por el apoyo del turismo del estado; la cual es una organización que toma a las ciudades más representativas gastronómicamente y las une año con año para hacer festivales gastronómicos y presentarlos en diferentes partes del mundo.

Por esto llevaron al equipo de Mesones de la Sacristía, donde labora actualmente, a participar en este festival. La sede fue en Montreal, Canadá, donde durante 5 noches estuvieron como restaurante invitados y ofrecieron cenas y degustaciones de la cocina poblana con un menú de 5 tiempos que incluía chalupas, tostadas de chapulines, sopa de habas, mole poblano y la cremita, el dulce típico estilo La California.

Menciona que encontró en esa semana a unos mexicanos que expresaron su agrado por los platillos presentados. "El mayor pago para alguien que se dedica al tema gastronómico es cuando tú haces un platillo y te halagan por ello, e incluso te mencionan que le recordaste a una persona". Le gusta saber que puede trasladar a las personas a ciertas épocas o lugares y tocar fibras sensitivas.

Su madre fue muy dedicada con su hermano y ella en cuestión de presencia, educación y valores; de igual manera formó parte de la vida de su nieta desde que era bebé, volviéndose un guardián de la pequeña. Ahora Ruth quiere dejar las mismas enseñanzas a su hija y disfrutar sus momentos libres con ella, aunque menciona que no ha sido fácil, pues los horarios en el restaurante son complicados. Le han beneficiado las facilidades que le dan para tener en ocasiones a su hija acompañándola, demostrando la mujer fuerte e inteligente que es.