Transmite a tu hijo bienestar y seguridad

Para los padres primerizos todo parece un reto, que con el tiempo van dominando a la perfección; sin embargo, debes saber que para esta etapa la tarea es más fácil entre dos, por ese motivo y porque los entendemos a la perfección, aquí te dejamos lo que todo adulto debería saber para bañar al nene por primera vez.

Importante

Un recién nacido necesita que lo limpies con un pañito suave humedecido en agua tibia. Es recomendable que esperes hasta que se le caiga el cordón umbilical, para darle su primer baño, que por lo general ocurre entre 10 y 14 días después del nacimiento.

Algo más que higiene

Esta es una estupenda oportunidad para poder transmitir a tu hijo sensaciones de bienestar y seguridad. Aprovecha este momento para establecer un contacto especial con él, donde se refuerce el vínculo afectivo. Estar sumergido en agua cálida relaja y agrada al bebé, hacerlo todos los días a la misma hora, por ejemplo, antes de cenar, es adecuado para que disfrute de un buen descanso.

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Todo en orden

La clave es tener todos los productos preparados y a la mano. Deben tener organización para sentirse más seguros, así que reúne todo antes comenzar a bañarlo, como el jabón neutro y shampoo para bebés, toallas de algodón, peine o cepillo, ropa limpia, pañales, un termómetro de baño, una bañera y una esponja.

Paso a paso

Cierra bien la puerta y ventana del cuarto o baño donde vayas a duchar al bebé. Después, debes comprobar que la bañera está limpia para llenarla con agua a la temperatura corporal, es decir, entre los 35 y los 37 grados centígrados, esto lo puedes saber utilizando un termómetro de baño o el codo para comprobar que la temperatura es la apropiada.

Cómo

Empieza por envolverlo en una toalla, sosteniendo su cuello con la palma de tu mano derecha para limpiar su carita y sus orejas con un trocito de algodón ligeramente húmedo. Prosigue con su cabeza, terminando por límpiale la zona que esté en contacto con el pañal, todo con la cantidad mínima de shampoo y enjuágalo perfectamente. Es importante no dejar de sonreírle y hablarle.

Arrópalo

Seca bien todos los pliegues de la piel del bebé, especialmente los que se encuentran debajo del mentón, detrás de las orejas y el área del pañal. Al finalizar envuélvelo para darle calor y comienza a vestirle de arriba abajo para que no pierda calor.