Idea millonaria; Latas de pintura

Aquí hablaremos del aerosol, artefacto que apoya la expresión del arte urbano y es el instrumento básico

Por nuestra mente pasan muchos tipos de latas, como: un insecticida, de refresco, desodorante de ambiente o laca para el cabello. Pero aquí hablaremos del aerosol, artefacto que apoya la expresión del arte urbano y es el instrumento básico.

Este spray refleja una de las funciones que le adjudicaron, los graffiti, que hemos visto en muros, paredes de casas, calles, puentes o árboles. Si bien en un principio sólo era con el fin de hacer una firma con el nombre del dueño de la lata, después se empezaron a realizar declaraciones de amor, a modo de protesta, buscando paz con signos, hasta ahora en que vemos verdaderas obras de arte.

Puedes llamarlo pulverizador, aerosol, espray, spray, atomizador o rociador. Éste es un recipiente donde se almacena un líquido, que tiene un dispositivo en la parte superior que permite expulsar el contenido en forma vaporizada, reducido a gotas muy finas. El mecanismo de expulsión puede ser activado manualmente o mediante un gas.

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Historia

Este concepto es más antiguo, ya que se dice que en 1862 se inventaron las latas metálicas, donde pulsando la parte de arriba salía lo que incluía la lata como si fuese un pulverizador, pero eran de acero, por lo que pesaban mucho, siendo así un fracaso comercial. Hasta que en 1899 se patentó el aerosol presurizado, un invento de Pertsch y Helbling que usaban como propulsores gases como el cloruro de etilo y de metilo.

Años después, en 1927 se patentó la lata de aerosol con válvula, muy parecida al aerosol moderno. La patente estaba a nombre de un ingeniero noruego llamado Erik Rotheim, pero no fue hasta 1941 que se inventó el pulverizador moderno gracias a los norteamericanos Lyle Goodhue y William Sullivan, quienes crearon lo que era el insecticida y se llamaba "bomba para insectos", las cuales fueron utilizadas en la Segunda Guerra Mundial por los soldados que estaban destinados en la zona del Océano Pacífico.

Aunque se trataba de un pulverizador de líquidos en general y probado con otros productos, en aquella época aún no se le había ocurrido a nadie utilizar un pulverizador para pintar.

No fue sino hasta 1949 que la lata de spray de pintura fue inventada por Edward Seymour. Al parecer la esposa de Edward, llamada Bonnie, fue quien sugirió la idea de utilizar un aerosol relleno de pintura. En realidad la inventora del actual bote de pintura en spray fue ella, pero en aquellos tiempos no se les reconocía a las mujeres su mérito. Edward Seymour fundó Seymour of Sycamore, Inc. en Chicago y fue la primera empresa que puso a la venta las botes de pintura, siendo el color aluminio el primero que fue utilizado.

Robert Abplanal fue el inventor real de 1953 de los recipientes de pintura en spray que conocemos en la actualidad, por ser el primero en utilizar el gas fluorocarbono que hoy en día contienen las latas. Actualmente algunos de los envases de aerosol son fabricados con materiales totalmente reciclables, y una parte importante del metal usado en su fabricación proviene de materiales reciclados.