Marisol Pérez, una mujer de retos

Marisol comercializa el mejor mezcal de Puebla: 7mo Otero

Marisol Pérez, una mujer de retos
Mitzi PULIDO | Marisol Pérez Marisol Pérez, una mujer de retos

Marisol Pérez Aguilar es administradora de empresas, tiene 37 años y trabajó diez años para el área automotriz. Después se dedicó a cuidar de su familia y comercializaba café, pero la vida la llevó a emprender y ella lo eligió apoyando a un productor poblano, comercializando su bebida.

Todo empezó por una cata de mezcal, donde platicó con los productores, quienes le dijeron todos los problemas que tenían por vivir lejos y no tener el apoyo para poder distribuirlo. Un mezcal en especial le sorprendió a Marisol; de ahí surgió la idea de representar a la marca por su sabor.

Ella pidió los datos del productor para contactarlo, sin saber que emprendería un viaje largo para buscarlo. Desde la ciudad de Puebla hasta llegar a Tehuacán, fueron las indicaciones que le habían dado, pero le advirtieron que en el camino se acabaría la recepción de señal para el celular; cuando ocurriera esto tendría que pasar por otros poblados y encontraría a la persona en el último.

Ahí empezó el verdadero viaje. En entrevista con el periódico El Popular, diario imparcial de Puebla, comentó que empezó a subir y bajar cerros viendo incluso águilas en su camino, hasta que llegó a la referencia exacta, un arco de piedras que tiene un maguey en la parte superior. Al pedir indicaciones y después de muchos asombros, por fin conoce a don Melesio Meza.

Puedes leer: Idea millonaria: El alambique a través del tiempo

La comunidad colinda con Oaxaca, haciendo que los factores sean favorables para la producción, realizándolo todo naturalmente sin productos artificiales, ya que tienen la experiencia ancestral. Desde 1938, el papá del productor ya lo elaboraba y él desde los seis años empezó a trabajarlo, pero estaban en una condición económica muy difícil para poder sacar de Caltepec su producto, sin una marca y con dificultad para dar a conocer su buen mezcal, vendiéndolo sólo en su región.

A Marisol le otorgaron toda la confianza, haciendo ver que los cambios que se le daría a la bebida estarían en buenas manos. Es así como ella comienza a trabajar con ellos, les dio un nombre, hizo una etiqueta, buscó la botella y le da el debido reconocimiento al maestro mezcalero.

Eso fue hace seis meses teniendo como resultado el 7mo Otero mezcal. Eligió este nombre porque el siete se considera como un número fuerte y mágico, aparte de provenir de la experiencia de Marisol, por ser el séptimo pueblo donde encontró al productor en aquel viaje; Otero significa cerro, por todos los que pasaron para llegar a ellos.

Gracias a ella, que lo ha trabajado, haciendo notar su trabajo incluso en ferias, donde también se han presentado otros productores y siendo la única comercializadora, se ha hecho notar por ser un buen producto. Así los visitantes, aunque tienen muchas opciones diciéndose ser buenas y a bajo costo, terminan comprándole a ella, por ser un mezcal de calidad con un sabor incomparable.

El siguiente paso para este mezcal es obtener el marbete, venderlo a restaurantes, esperar la denominación de origen y poder sacarlo del país, para que en otras partes del mundo conozcan están bebida totalmente artesanal. Marisol quiere hacer visible que en el estado también se produce mezcal de calidad e invita a las personas a probar 7mo Otero y poner en alto lo propio de Puebla.