Curiosidades del mole de caderas
Conoce aquí algunas curiosidades de esta popular comida
Si hay algo que realmente caracteriza a Puebla y por lo que realmente es reconocida, es por su gastronomía. Aquella que deja un grato recuerdo o un exquisito sabor de boca. En cuanto se piensa o se prueban unas chalupas, molotes, chiles en nogada o un mole poblano, inmediatamente se siente como estar en casa. Sin embargo existe otro platillo típico de la región, el mole de caderas, el cual sólo se consume en los meses de octubre y noviembre. Conoce aquí algunas curiosidades de esta popular comida. Lee: Cuidados para cada tipo de piel
Dato histórico Se cree que la tradición de este platillo empezó desde el siglo XVI. No obstante, fue hasta el siglo XVII cuando se comenzó a realizar de manera periódica. Es un platillo muy conocido en Puebla, pero el punto de reunión donde se realiza el ritual para la elaboración y matanza del animal es en Tehuacán. Simbolismo prehispánico De acuerdo a la costumbre española, los ganaderos presentan un tributo en forma de agradecimiento por cumplir un año más de crianza a la Virgen de Guadalupe; y por parte de la tradición prehispánica, es una forma de representar un homenaje de respeto hacia el dios de la guerra: Huitzilopochtli. Es un ritual La elaboración de este platillo que es considerado gourmet, es con un ritual. Cada tercer jueves del mes de octubre, en medio de danzas y cánticos, al primer chivo lo adornan con flores de muerto. Posteriormente, como forma de agradecimiento y petición es ofrecido a los dioses por un Tetlate —chamán—. Forma de pago antiguamente Hace más de 300 años, los hacendados y ganaderos pagaban a los sirvientes de la matanza con los huesos del chivo –caderas y espinazo—. Con estas partes hacían un caldillo a base de jitomates y chile, al cual se le agregaban vegetales de temporada, como ejote, ayocotes y guajes; de esta forma nació el mole de caderas. Preparación del animal Para que los chivos sean los adecuados para la matanza, no deben tomar agua, su alimento es a base de hierbas del monte adonde son llevados, y se les da sal para que retengan líquidos. Esta trashumancia por la que pasa el animal ocasiona que no tenga grasa como el ganado caprino de granja, dando como resultado un sabor de carne fuerte. Platillos y costos Un total de hasta 25 tipos de platillos se pueden preparar con la carne de este animal: el jugo de caderas –mole de caderas—, tiene un costo desde 850 pesos; el chito y la maciza, desde 230 pesos; la costilla y tripa desde 190 pesos; y la ubre alcanza un costo desde los 300 pesos el kilo. Cabe resaltar que cada comida es orgánica, ya que después del proceso de preparación el animal es sacrificado, por lo que no entra en contacto con químicos. |