Ahora que está por iniciar la estación de calor y la temporada vacacional de Semana Santa, se antoja darse una escapada a la playa, y qué mejor que al confiable Puerto de Veracruz, un lugar lleno de festividad, alegría y atractivos para pasar un rato agradable.

A tan sólo tres horas y media de la ciudad de Puebla se ubica este puerto donde abundan los mariscos, las playas y la cálida gente jarocha. Anímate a conocerlo en un fin de semana.

Museo Baluarte de Santiago

Localizado en la calle de Francisco Canal se ubica el Museo Baluarte de Santiago, una edificación icónica militar que data del siglo XVII, el cual formaba parte de un grupo de nueve baluartes más, que se encargaba de custodiar al puerto de las invasiones enemigas y de ataques de piratas. A partir de 1991, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) lo declaró Patrimonio Histórico y fue abierto al público como un museo, donde apreciarás Las Joyas del Pescador —42 lingotes de oro—, testimonio de los envíos realizados a España. 

Museo Histórico Naval

Un recinto que entre sus paredes resguarda la historia naval, marítima y un poco más sobre el Puerto de Veracruz.

Los visitantes podrán recorrer sus 28 salas para apreciar las más de mil 700 piezas que exponen.

Aquí observarás barcos a escala, uniformes de tripulaciones, algunos instrumentos de navegación y también artículos museográficos, para entender un poco más sobre la historia de la Armada de México. Se ubica en la calle Mariano Arista 418. La entrada tiene un costo de apenas 45 pesos. 

Faro de Venustiano Carranza

Otro de los atractivos arquitectónicos que tiene el Puerto de Veracruz es el Faro de Venustiano Carranza, una construcción neoclásica inaugurada desde 1902, donde sus arquitectos, Salvador Echegaray y Ernesto Lattine, decidieron incluirlas en las demás obras que conforman el puerto jarocho y que fueron inauguradas ese mismo año por Porfirio Díaz.

Con 50 metros de altura, se ha ocupado como faro para el malecón; además, alberga las oficinas administrativas de la Tercera Zona Naval Militar.

Un punto negativo es que no podrás acceder a su interior, pero podrás recorrer la explanada del malecón con una vista del faro, para retratarte mientras disfrutas del sonido del oleaje.