Mantén tu productividad en casa

Establecer un horario y realizar una lista de pendientes son los principales puntos

Mantén tu productividad en casa
Agencias | No olvides organizar tus horarios de comidas y descansos. Mantén tu productividad en casa

 

Ante el brote de coronavirus que está al rededor del mundo, muchas empresas han optado porque sus trabajadores realicen home office o trabajo desde su hogar, esto para evitar que se propague el Covid-19. Esto puede suponer diferentes aristas, desde las positivas como negativas, pero a su vez puede ser un arma de doble filo para los trabajadores, ya que por el hecho de estar en su casa podrían distraerse y bajar el nivel de productividad y por eso mismo te recomendamos algunos consejos para que esto no suceda.

 

Establece un espacio

 

El primer paso para que empieces a trabajar desde tu hogar sin perder el ritmo de productividad, es que establezcas un espacio de trabajo para evitar cualquier tipo de distracción. Tienes dos opciones, puedes elegir una habitación temporal para adaptarla a tus necesidades o bien, si ya cuentas con un estudio de trabajo, desde ese sitio comenzar tu jornada laboral. Ten en cuenta que debe contar con la iluminación suficiente, aislamiento del ruido externo y algo importante, una silla bastante cómoda.

 

Ventilación adecuada

 

Otro factor importante para que no disminuyas tus niveles de productividad, es una ventilación adecuada, ya que si te encierras en una habitación donde el aire no transcurra, ocasionará que tu cerebro se canse muy rápido y empieces a bostezar, por ende, te dará sueño y empezarás con distracciones. Además de esto, estarás ayudando a que el Covid-19 no se expanda, puesto que las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, es que la circulación del aire debe ser fluido.

 

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Llevar una agenda

 

Quizá el quedarte en tu casa para hacer tus labores puede significar que pierdas la noción del tiempo y llegue un momento en que no sepas por dónde empezar o por dónde terminar, por eso mismo, antes de comenzar con tus actividades, anota en una agenda o libreta el orden conforme irás realizándolas. Por ejemplo, si quieres empezar desde las 8 horas, tendrás que levantarte a las 7 horas para preparar tu desayuno y darte un baño para estar despierto, para que cuando sea tu hora de cierre puedas cerrar la computadora sin pendiente alguno.

 

Labores domésticas versus laborales

 

Ten en cuenta que a pesar de estar en tu hogar, aún estás en horas laborales, por lo que deberás separar las actividades domésticas de las que interfieran con las de tu trabajo, pero de igual forma, no tendrás que pasar las 24 horas del día pegado a la computadora atendiendo asuntos laborales. Deberás establecer muy bien tu horario de trabajo para poder atender ambas cuestiones. Eso sí, habla estos puntos con las personas correspondientes desde un inicio, para dejar claros los límites y evitar malentendidos.