¿Qué hacer en caso de necesitar atención médica para mi mascota?

Si has dado positivo al coronavirus, es recomendable que sea otra persona la que se haga cargo de tu mascota.

En este tiempo de confinamiento en el que se encuentra gran parte de la población mundial es inevitable que todas aquellas personas que conviven con algún animal de compañía tengan dudas relacionadas con ellos. No solo por el virus o la convivencia en el hogar, sino por su salud y los servicios que regularmente obtienen en clínicas.

¿Qué sucede con la rutina de mi mascota?

Primero debes saber que los establecimientos relacionados con la venta de alimentos o productos para animales pueden continuar abiertos ya que garantizan el abastecimiento y la salud animal. Además, en cuanto a sus paseos diarios, los perros pueden seguir saliendo a la calle, siempre y cuando cumplan las normas de solo sacarlo una persona, llevarlo siempre atado, no interactuar ni con otras personas ni con otros perros, mantener la distancia establecida, no alejarse del domicilio y, después al llegar a casa, limpiarle las patas a nuestro perro para desinfectarlo como medida preventiva de salud.

También lee: Infecciones en la piel más comunes en mascotas

Ten un veterinario de confianza

En caso de tener alguna pregunta con respecto a su salud y no sabes si es lo suficientemente grave como para salir de casa, puede ser sobre alguna medicación, prueba o diagnóstico que ha recibido tu perro o tu gato. Existen los veterinarios que consultan de manera online, revisa si tu doctor lo hace o investiga quien practica este método en tu ciudad.

¿Cómo saber si mi mascota estará bien al no verlo un doctor?

Lo entendemos, la incertidumbre puede ser mucha además de que no todas las dudas sobre la salud de nuestros animales de compañía pueden resolverse mediante una consulta a distancia. Por ello existen algunos casos urgentes que solo se pueden solucionar con una consulta presencial, como los siguientes ejemplos: heridas abiertas; fracturas, que podemos notar como la deformación de una extremidad, cojeras o dolor a la palpación; vómitos o diarreas que no remiten, sobre todo si contienen sangre, se trata de un cachorro o hay deshidratación; cualquier sangrado; pérdida de la consciencia; alteraciones de la respiración, que pueden notarse como diferentes ruidos, boca abierta, jadeos acusados o respiración abdominal; tos que no cesa; anorexia, es decir, deja de comer o ingerir solo cantidades mínimas; coloraciones anormales de las mucosas o de la piel, como una tonalidad amarillenta, blanquecina o azulada; fiebre de más de 39 ºC o picor intenso; así como el empeoramiento en perros o gatos ya diagnosticados con alguna enfermedad.

Ante cualquiera de estos síntomas, no dudes en acudir directamente a la clínica veterinaria. Solo recuerda que lo primero siempre es llamar por teléfono y explicarle la situación al profesional. Este nos dará todas las indicaciones necesarias para poder pasar a consulta en condiciones de seguridad para todos.

  • URL copiada al portapapeles