¿Cómo acomodar la cama según el Feng Shui?

Esta ideología te da las claves para que tu cama sea un verdadero lugar de reposo.

Idealmente la habitación es un espacio de descanso y relajamiento, donde puedes dejar atrás el estrés cotidiano. No obstante, hoy en día es difícil dejar el "ruido" fuera, nos referimos a la acumulación de objetos en espacios reducidos, las notificaciones del móvil, los vecinos y muchas cosas más que no nos permiten dormir como deberíamos. Para aprender a hacer de nuestro cuarto un espacio de calma y bienestar podemos aplicar las reglas del Feng Shui, sobre todo las que se refieren al entorno de la cama. Aquí te las contamos.

Tu cama es tu espacio más íntimo

El Feng Shui busca fomentar el bienestar a través de la armonía del ser humano con su entorno, haciéndolo consciente de cómo ocupa su espacio más inmediato. Según los principios de esta filosofía la cama es el mueble más importante de la casa.

Colócala contra la pared y aporta seguridad con un cabecero

Cuando nos sentimos seguros descansamos mejor. Por ello, es bueno sentirnos protegidos y respaldados apoyando la parte delantera de la cama contra la pared. Los expertos en esta ideología dicen que la mejor ubicación de la cama es con el cabecero apoyado en una pared y fuera del recorrido puerta-ventana.

No coloques la cama bajo la ventana

Y no dejes espacios vacíos. Por el mismo motivo de fomentar la sensación de soporte y seguridad, evita colocar la cama bajo una ventana. Además, así te mantendrás alejado de ruidos, olores o luces del exterior que puedan entrar a través de ella.

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Evita que la cama esté en línea recta con la puerta

No coloques los pies de la cama directamente en línea recta con la puerta de salida. Nos hará estar atentos a ruidos y movimientos que se produzcan en el pasillo y sentiremos que la energía "se escapa" de la habitación. Tampoco la alinees la parte delantera de la cama con la puerta del baño, ni apoyada en la pared que da al mismo, para evitar estar en contacto directo con los ruidos del agua y posibles humedades.

Apuesta por la simetría: deja espacio a los lados

La simetría genera paz, orden y asentamiento, así que lo ideal es poner dos mesitas con sus respectivas lámparas y alfombras o deja libres los espacios a ambos lados de la cama a menos que se trate de una cama o litera infantil, en ese caso podemos apoyar también contra la pared uno de los lados para reforzar el sentimiento de protección.

No conviertas tu cama en un almacén

Evita también el ruido visual producido por la acumulación de objetos. Es recomendable no dejar nada acumulado debajo de la cama, como zapatos, herramientas u otros objetos pesados. Lo ideal es no colocar nada, pero sino es posible por temas de espacio, mejor sustituir estos objetos por ropa de cama, como sábanas, edredones o ropa de otra temporada.

 

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