Mata crimen a 24 policías y militares entre 2017 y 2018

Los municipios con más casos son Amozoc, Huehuetlán El Grande, Palmarito Tochapan, Quecholac y Palmar de Bravo

Mata crimen a 24 policías y militares entre 2017 y 2018
Especial | Los elementos activos pertenecían a la Sedena, Semar, Seguridad Pública, la fiscalía y la Policía Federal Mata crimen a 24 policías y militares entre 2017 y 2018

Al menos 24 elementos de las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena), Marina (Semar), Seguridad Pública (SSP), Fiscalía General del Estado (FGE), la Policía Federal (PF) y agentes municipales, fueron asesinados en la entidad poblana durante 2017 y 2018 a causa de choques contra huachicoleros o accidentes entre los activos.

A través de diversas solicitudes de acceso a la información, El Popular, diario imparcial de Puebla, corroboró que 2017 se convirtió en uno de los años más violentos para las fuerzas de seguridad, tanto estatales como federales, al tenerse enfrentamientos contra bandas de robo de hidrocarburo que vulneraron su vida.

Tan sólo en lo que va de 2018 han asesinado a nueve policías municipales en Puebla; seis en Amozoc el pasado 15 de junio, luego de que los emboscaron, al realizar un servicio de vigilancia; mientras que los otros tres decesos sucedieron el pasado 14 de julio en Huehuetlán El Grande.

De todas las dependencias de seguridad que reportaron tener elementos asesinados en Puebla, destacaron las tropas de la Sedena, al sumar cuatro decesos en mayo del 2017, luego de que emprendieron un operativo en Palmarito Tochapan, Quecholac, donde sostuvieron un enfrentamiento armado.

La noche del 3 de mayo de 2017, los soldados acudieron al citado municipio, donde los sorprendió un grupo de delincuentes que abrió fuego en su contra, asesinando a los activos: Rolando Martínez Hernández, Máximo Maya Hernández, José Manuel Larumbe Rayón y Miguel Vázquez Álvaro.

Ante el tiroteo en Quecholac, la Procuraduría General de la República (PGR) abrió una investigación contra 30 elementos del Ejército, tras filtrarse un video en el que se observa que uno de los uniformados sometió en el suelo a un civil, para luego ejecutarlo de un tiro en la cabeza.

Dentro de la lista que la Sedena entregó vía transparencia, se corroboró que dos de sus uniformados asesinados eran policías militares y los otros dos de infantería, pero todo el grupo murió tras recibir diversos tiros de arma de fuego por parte de presuntos ladrones de combustible, pertenecientes a Quecholac.

Matan a cuatro estatales: SSP

 

En otra solicitud de acceso a la información, la SSP informó a esta casa editorial que, durante abril y julio de 2017 asesinaron a cuatro de sus activos, por hechos que van desde presuntos errores en el uso de armas, incluso fueron tomados por sorpresa, acribillándolos.

Entre los casos que informó la SSP que registraron de elementos muertos, el primero ocurrió el 8 de abril del 2017, cuando uno de los uniformados limpiaba su arma, disparándole a su compañero, Eloy H, en el pecho, lo que ocasionó su fallecimiento, a la par, aseguraron al presunto homicida.

Otro de los casos pasó en mayo, convirtiéndose en el mes más violento para los uniformados, al tenerse dos decesos; el primero ocurrió el 9 de mayo en la capital poblana, luego de ser atropellado en el Barrio de Analco, mientras que el otro sucedió en Palmar de Bravo.

La muerte de Palmar de Bravo se registró el 20 de mayo de 2017, después de que uno de los activos accionó su arma por accidente, impactándole la bala a otro de sus compañeros, con lo que se detuvo al responsable de la muerte, que ocurrió en el Arco de Seguridad en el municipio antes mencionado.

Para el 9 de julio se tuvo el último asesinato de uniformados de la SSP durante 2017, a consecuencia de un tiroteo que se desató en Chalchicomula de Sesma contra uno de sus activos, lo que derivó en el aseguramiento de uno de los presuntos sujetos que abrió fuego contra el occiso.

Asesinan a tres investigadores de la FGE

Mediante la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) la FGE detalló a este medio que, durante todo 2017, sólo se reportaron los asesinatos de tres de sus activos en Atzitzintla, luego de que iniciaron una serie de investigaciones contra las autoridades municipales, por supuestos nexos con el crimen organizado.

El 8 de abril de 2017 se localizaron los cuerpos de los tres elementos de la Fiscalía de Secuestro y Delitos de Alto Impacto (Fisdai), para luego emprender acciones contra el Ayuntamiento de Atzitzintla, pues aseguraron a 85 sujetos, mientras que su presidente municipal, José Isaías Velázquez, pidió licencia.

Las primeras averiguaciones que hizo públicas la FGE confirmaron que el motivo por el que aseguraron al presidente municipal, junto a uniformados, se atribuyó a que se encontraban coludidos con la banda de huachicoleros, encabezada por El Bukanas.

Matan a cuatro Policías Federales y de la Semar

Por una solicitud de acceso a la información, la Policía Federal informó a este medio, que durante 2017 asesinaron a dos de sus elementos en Puebla, al tener enfrentamientos armados o por accidentes, y se suma la muerte de dos elementos de la Semar.

El 10 de enero de 2017 se registró una balacera en la localidad de José Isaías Velázquez, Tehuacán, con presuntos ladrones de hidrocarburo, lo que ocasionó el deceso de Saúl Alcobar Torres, uniformado que recibió disparos tanto en el pecho como en el abdomen, quien murió en la clínica a la cual fue trasladado.

Mientras que el otro Policía Federal murió en marzo de 2017 en Tepeaca, municipio con la presencia de bandas de huachicoleros, donde uno de sus activos, perteneciente a la División de Gendarmería, falleció por un traumatismo toracoabdominal, ocasionado por impactos muy fuertes en el cuerpo.

La Semar detalló vía transparencia que el primer asesinato que tuvo en 2017 se dio el 21 de julio, cuando se enfrentaron con probables ladrones de hidrocarburo en Telpatlán, poblado perteneciente a Vicente Guerrero, donde falleció uno de sus infantes, tras recibir uno de los proyectiles.

El otro asesinato que registró la Semar en Puebla sucedió el 28 de septiembre del 2017, derivado de un operativo para capturar a El Chaparro, líder del cartel de los Zetas en la entidad, pero en el proceso se desató un tiroteo que dejó como saldo la muerte de uno de sus elementos de infantería.