Desaparece joven abordo de la Bestia

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Redacción


Febrero 11, 2013
“Susana” se suma a las estadísticas de desaparecidos. Diversos testigos señalan que la menor sufrió violación a manos de policías de Orizaba Jorge LÓPEZ Corresponsal Apizaco.- Desangelado, pero con la esperanza de encontrar con vida a su prima “Susana” que se subió al tren en los túneles en Xalapa, Veracuz, “Maximiliano Ríos” recorre la vía que llega a la estación de ferrocarriles de esta ciudad. Ha preguntado en diversas casas y tiendas que se ubican en la orilla. Sin embargo, hasta el momento nadie le ha brindado información de su paradero. Para no despertar sospechas, viste pantalón de mezclilla y una camisa casual color rojo. La suerte no está de su lado. Ha viajado por diversos municipios de estados circunvecinos, buscándola. Espera que en el próximo tren, además de diversas cargas, llegue su familiar. Tiene una leve esperanza de volverla a ver. En un recorrido realizado por El Popular, diario imparcial de Puebla, cerca de la estación del municipio rielero, “Maximiliano” cuenta que su peregrinar lo hizo llegar a este lugar buscándola tanto en las corporaciones policiacas como en los hospitales, pero no ha dado con ella. “Vengo de Veracruz. Ella es originaria de acá pero venía de regreso a su casa. En el trayecto dicen que en Orizaba, en los túneles hay muchos asaltos, incluso de los mismos policías. Sólo sé que ahí la bajaron y desde entonces no sabemos nada”, explicó con preocupación. El joven agregó, “Ella tiene 17 años, mide 1.60 y es de tez morena. Fue a estudiar a Veracruz y por allá la asaltaron. Fue víctima de violación. Se regresó en el tren porque sus papás ya no viven y desde ahí no hemos vuelto a saber de ella. “Maximiliano” asegura que su prima traía teléfono celular, pero desde hace días aparece como apagado y no encuentra otra forma de localizarla. Las lágrimas inundan su rostro al hablar de ella. Indicó que “un amigo se supone que la iba a traer pero al llegar a los túneles de Orizaba, los policías empezaron a revisar a todos. A ella la bajaron y no volvió a subir al tren”, lamentó. A pesar de la incertidumbre “Maximiliano” ha subido durante nueve días para ver si llega a Apizaco, “nadie la ha visto, no saben nada. Pregunté en La Casa del Migrante pero no te dan razón. Dicen que si pasó, pasó. Que si le sucedió algo en el camino es su responsabilidad”, resaltó. En esta ocasión pide que no le tomen fotografías. Dice que ya lo tiene identificado el personal de Ferrosur, de quienes también ha recibido negativas. Sin embargo, asegura, que continuará su búsqueda, tanto en el tren como en el camino de paso. “Voy a seguirla en espera de que vuela. Si intento subirme al tren, piensan que vas a robar porque todos lo hacen. Ojalá llegue pronto y con bien”, exclamó esperanzado. El joven de 22 años sigue su camino en las vías, en espera de que los migrantes recién llegados puedan darle alguna pista de lo que sucedió en el camino. El silbato de la estación ferroviaria anuncia que La bestia ha llegado y trae consigo cientos de indocumentados, cada uno con su propia historia.
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