Fortaleza política de RMV

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Redacción


Enero 13, 2014
Carlos Gómez Rafael Moreno Valle llegará esta semana a la mitad de su sexenio tranquilo, satisfecho y con fuerzas políticas suficientes para cerrar de manera intensa su administración y mantener vivas sus aspiraciones a la Presidencia de la República. Las condiciones políticas con las que llegó al gobierno de Puebla eran muy diferentes a las actuales porque había serias dudas en la forma en que gobernaría con los partidos que lo ayudaron a ganar las elecciones en el 2010. Sin embargo, hoy tiene el control total de los partidos locales porque el Panal es su principal aliado con todo y la caída de su madrina política Elba Esther Gordillo y lo manejará con su empleada Susy Riestra. Logró someter a los panistas y ahora los controlará desde sus propias estructuras con Rafael Micalco y Pablo Rodríguez, el PRD sigue como una caricatura que primero usó la cara de Miguel Ángel de la Rosa y hoy es turno de Eric Cotoñeto y Movimiento Ciudadano es su aliado monetario en la persona de José Juan Espinosa. Pero ahora tiene su propio partido Compromiso por Puebla y sumó al partido Pacto Social de Integración a sus filas y tiene sometidos e infiltrados al Partido Revolucionario Institucional y al PVEM. Rafael Moreno Valle es amo y dueño del Tribunal Superior de Justicia, del Congreso del Estado, del Instituto Electoral del Estado, del Tribunal Electoral del Estado, de la Comisión para el Acceso a la Información Pública, de la Auditoria Superior del Estado y todos aquellos organismos públicos que representan algún tipo de poder en la entidad. Resalta que con el rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), Alfonso Esparza Ortiz, mantiene una interesante alianza estratégica en materia educativa y ajena al terreno político. Y los más serios aspirantes a la candidatura a mini gobernador y gobernador son parte de su equipo de trabajo como Roberto Moya, Cabalán Macari, Jorge Aguilar Chedraui, Patricia Leal Islas y Antonio Gali Fayad. Pese a que sus principales obras como la Estrella de Puebla, el Teleférico de Puebla y la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA) simplemente han quedado muy lejos de lo esperado, eso no ha repercutido en el plano político. La fortaleza política de Rafael Moreno Valle es real y puede palparse en cualquier decisión de los partidos políticos e instituciones públicas antes mencionadas. El gobernador de Puebla prácticamente llega a la mitad de su sexenio sin ningún tipo de oposición y eso no es casualidad, es planeación y ajustes sobre la marcha. Quizá la única baja importante en su equipo de trabajo es la de Fernando Manzanilla, pero no es la primera vez que se alejan y no creo que sea la última. [email protected] @gomezcarlos79
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