DE FRENTE Y DE PERFIL

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Redacción


Enero 07, 2015

RAMÓN ZURITA SAHAGÚN

Avanzados

Iniciado el 2015, lo atrayente de la actividad política hace necesario revisar las contiendas que se desarrollarán en nueve estados del país, en los que los ciudadanos irán a las urnas, para votar, entre otros cargos por sus futuros gobernadores.

Serán diez los partidos que participarán en este proceso electoral, aunque se duda que seis de ellos alcancen alguna victoria en este rubro y el séptimo, apenas podrá competir en alguna entidad con posibilidades de triunfo.

Es ampliamente conocido que los tres partidos que competirán por las victorias en esas entidades serán PRI, PAN y PRD, mientras que el cuarto que podría tener alguna posibilidad en Guerrero, sería Morena.

Los otros seis, simplemente se encuentran fuera de esa posibilidad y se atendrían a un milagro, para gobernar una entidad.

De acuerdo a los cálculos que hacen los propios partidos, el PRI mantendría la supremacía en la mayor parte de los estados, con siete victorias, mientras que el PAN podría ganar un máximo de cuatro y el PRD apuesta por conquistar dos de los estados en disputa.

Si el PRI conquista siete, quedarían solamente dos para repartir entre panistas y perredistas, mientras que si el PAN alcanza su máximo contabilizado, quedarían cinco para repartir entre priistas y perredistas, mientras que en los cálculos mayores del sol azteca, dejarían siete para repartir entre priistas y panistas.

Pero serán los ciudadanos que concurran a las urnas los que tengan la decisión en sus manos y definan cuál de ellos tendrá el control de la administración pública estatal.

En el renglón de las candidaturas, los partidos empiezan a perfilar a sus posibles aspirantes a la competencia, siendo el PAN el que aventaja a sus adversarios.

Acción Nacional tiene ya enfilado a sus candidatos en cinco de los estados en los que considera tendrá máxima competencia y amplias posibilidades obtener la victoria.

Nuevo León, catalogada como la joya electoral más preciada de esta competencia, tiene en Margarita Alicia Arellanes Cervantes a su eventual abanderada, bien cimentada en imagen pública y con un gran potencial electoral.

Margarita desplazó a los demás aspirantes panistas a la competencia estatal, quedándose Mauricio Fernández Garza, que ya fue candidato hace doce años y perdió en las urnas ante J. Natividad González Parás. Ugo Ruiz, alcalde de Garza García tampoco alcanzó la popularidad que lo impulsara a la nominación al gobierno estatal.

Arellanes Cervantes consiguió la victoria en el ayuntamiento de la capital estatal hace tres años y desde ahí se columpió a la candidatura al gobierno estatal, el que cree conseguirá el próximo mes de junio.

Otra aspirante ya definida por Acción Nacional para enarbolar su bandera es la senadora michoacana Luisa María Calderón Hinojosa, enfilada por segunda ocasión a la candidatura al gobierno estatal.

Calderón Hinojosa dejó atrás en todas las encuestas a sus adversarios internos Marko Cortés, coordinador de la campaña presidencial de Gustavo E. Madero Muñoz y quien perdiera en dos ocasiones consecutivas la elección para el ayuntamiento de Morelia y Salvador Vega Casilla, senador y ex secretario de la Función Pública en el sexenio calderonista.

Será la segunda ocasión en que compita Luisa María por el gobierno michoacano, ya que en 2011 fue vencida en las urnas por el priista Fausto Vallejo Figueroa, cuando era la favorita de todas las encuestas.

En aquel entonces la hoy senadora michoacana contaba con el aval de la administración presidencial de su hermano Felipe y aún así fue enviada al segundo sitio, dejando para los perredistas que eran gobierno en el estado el tercer sitio de la contienda y muy lejano de los dos primeros.

Resulta curioso como un partido catalogado como conservador y, en algún momento, de misógino delineó sus dos primeras candidaturas a gobiernos estatales con mujeres y ambas con un gran potencial para ganar a sus competidores de otros partidos.

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