Todavía inundados de felicitaciones, buenos deseos y de formular sendos propósitos para este año, el 2017 inicia de manera abrupta para los mexicanos, con el incremento al precio de las gasolinas y el diésel en el país, que ha provocado que en siete entidades, ciudadanos y simpatizantes de partidos políticos comenzaran el primer día del presente año, con el cierre de gasolineras, bloqueos en tramos carreteros y con marchas en protesta por el alza, asimismo hubo desabasto de combustible.

Ya se registró una marcha contra el gasolinazo en la Ciudad de México, ésta fue convocada a través de las redes sociales y partió del Ángel de la Independencia hasta el Zócalo, donde se lanzaron consignas contra el gobierno federal, por las medidas adoptadas.

Lo cierto es que si ya en el 2016 el bolsillo de los mexicanos se encontraba mermado, hay incertidumbre por cómo iremos a llegar en los próximos meses. Ya hay incremento en artículos de la canasta básica, medicamentos y todo tipo de insumos y servicios.

La situación se torna tensa y aunque los mexicanos clamamos por una paz y seguridad duraderas, porque se abata realmente a la delincuencia organizada, las acciones que el gobierno federal realiza no contribuyen en nada a mejorar la situación, por el contrario, habrá hasta padres de familia que se vean obligados a delinquir porque la economía ya no da para más.

El descontento es tal, que un grupo de transportistas, en su mayoría taxistas agrupados en el Movimiento Civil de Resistencia, tomaron y cerraron cuatro gasolineras en el binomio turístico de Ixtapa y Zihuatanejo. Asimismo algunas de las gasolineras de la Ciudad de México, han cerrado por desabasto de combustible, y otras únicamente vendieron gasolina Premium y diésel, porque la Magna se agotó.

A través de las redes sociales el Partido de la Revolución Democrática, prepara distintas acciones contra el gasolinazo, entre las que destaca una marcha el próximo domingo 8 de enero. En una reunión dirigentes e integrantes del Comité Ejecutivo Nacional del partido, habrán de definir las actividades con las que buscarán dar revés al alza a las gasolinas. Otros partidos también planean realizar sendas manifestaciones.

Y es que el tema da mucho de qué hablar, ¿pretende acaso el gobierno federal que como sociedad nos quedemos con los brazos cruzados, callando y asintiendo ante sus ocurrencias? El pueblo señores, ya no da para más. Ahora bien, si como en Holanda –país del primer mundo–, estuviéramos preparados para utilizar la bicicleta, con vías públicas adecuadas y normas que la ciudadanía cumple, contando además con transporte público también de primera. Pero aquí dista mucho la situación, hay miseria, y si, un pueblo bicicletero –como se conoce irónicamente– a aquel que carece de "desarrollo". Cierto es que al obligarnos a usar la bicicleta de paso se combatiría la obesidad y las enfermedades que de ella derivan.

Las protestas apenas comienzan y el gasolinazo no habrá de pasar desapercibido, México no merece los gobernantes que tiene, que han permitido el hurto desmedido de recursos en diversas entidades e instituciones. Que políticos signan despachándose con la cuchara grande, cuando tantos compatriotas de plano ya no tienen qué comer.

Así las cosas, habrá que ver en qué terminará este asunto porque ya hay hartazgo de parte de los mexicanos, este sexenio ya se hizo eterno, y es momento de enfrentar a las autoridades, si a quienes tenemos estudios de postgrado se nos hace difícil comprender el incremento exorbitante a la gasolina, cuanto más difícil le será comprender a quienes carecen de una educación.

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