Parece como si la presidencia municipal de Tehuacán estuviera acéfala, pues no hay quien atienda y resuelva las peticiones que hemos planteado, desde hace un año, los antorchistas, y que son las siguientes: la entrega de 40 constancias de uso de suelo para que estas colonias humildes puedan continuar con el trámite de la electrificación, la entrega de una camioneta embestida por falta de precaución del chofer que conducía un camión de la ruta de Cuayucatepec y el respeto de la propiedad del indígena Doroteo Montalvo en la colonia Aguas Blancas II.

Ni Ernestina Fernández Méndez, presidenta municipal, ni ningún otro integrante del cabildo o funcionario se ha interesado en entablar diálogo serio con nosotros para resolver las demandas, que no implican recursos económicos, sino sólo trámites administrativos.

Después de sinnúmero de gestiones durante un año y de cuatro manifestaciones, 40 colonias siguen esperando que la alcaldesa les dé las constancias de uso de suelo para gestionar los recursos económicos a nivel federal para la electrificación de sus localidades. No se trata de que el ayuntamiento invierta dinero en las redes de energía eléctrica, sino que Ernestina Fernández firme y selle 40 hojas de papel en el que se indique que el lugar donde se colocarán los postes de luz es vía pública. ¡Eso es todo, y nada más!

Estas modestísimas y humildes peticiones se niega a resolver la alcaldesa de Tehuacán porque gobierna al viejo estilo caciquil: con cerrazón y abuso de poder. Sin embargo, no es justo que miles de tehuacanenses sigan viviendo en la penumbra y sin servicios básicos; no es justo que al indígena Doroteo Montalvo le arrebaten un lote de su propiedad, escriturado en el registro público de la propiedad, y sólo porque la autoridad municipal afirme verbalmente que el lote es del ayuntamiento lo despojen del predio que adquirió con el esfuerzo de muchos años de trabajo; no es justo que después de ser víctima de un imprudente conductor del autobús que arrolló la camioneta del compañero Enrique Oropeza ahora le quieran cobrar daños y multas por el contubernio de tránsito municipal con algunos transportistas.

El Movimiento Antorchista quiere dejar constancia de que ha buscado solución mediante el diálogo y una larga labor de gestoría que ya lleva un año, pero ante la cerrazón y prepotencia de la presidenta municipal de Tehuacán no nos deja otra alternativa que hacer uso de nuestros derechos constitucionales de manifestación pública y pacífica para exigir a las autoridades solución a estas sencillas peticiones.

También exigimos a la alcaldesa Ernestina Fernández el respeto irrestricto a nuestro derecho de manifestación y protesta pública y la responsabilizamos de cualquier agresión que sufra algún antorchista durante la manifestación que realizamos este jueves 19 de septiembre, pues en días pasados, utilizando a transportistas que ni conocen la causa de la protesta de Antorcha, ha pretendido intimidar, amenazar y evitar de esa manera las protestas.

La única manera de evitar las manifestaciones es entregando las constancias de uso de suelo que solicitan las 40 colonias que requieren electrificación, entregar la camioneta reparada al chofer que fue víctima de un accidente de tránsito y respetar el terreno de un vecino de Loma Blanca II. ¡Nada más, pero nada menos!