Tomarse en serio a Jonny Greenwood

  • URL copiada al portapapeles

Diana Gómez


Marzo 04, 2018

Hace algunas décadas, para hablar de Jonny Greenwood se tenía que pasar forzosamente por Radiohead. No era para menos, se encargó de confeccionar el Kid A, y la mayor parte de la producción creativa de In Rainbowns corrió a su cargo, además de ser una cabeza importantísima del grupo.

Pero las cosas han cambiado gigantescamente y sus notas han tomado un rumbo independiente. Entonces, ¿por dónde comenzar a explicar a este músico y su nueva etapa? Probablemente por Junun, un trabajo excelso que hizo en la India en 2015, que le valió todos los aplausos y miradas del mundo.

Funcionó como un gran paracaídas, aunque tal vez tengamos que retroceder muchísimo más. Su carrera es larga, y en ella encontró a sus nuevos y potentes aliados musicales: Nigel Godrich (también productor indispensable de Radiohead) y el cineasta, Paul Thomas Anderson.

Con Godrich la relación se dio por inercia. Desde los 90 esta dupla ha funcionado grandiosamente, esto se debe a que su manera de armar música ha sido con grandes trazos audiovisuales.

Su trabajo funcionó porque Greenwood es un músico estudiado y completísimo, que no sólo domina la guitarra de forma virtuosa, sino también la música de cámara, las orquestas y por ende todos los metales.

Hay que mencionar también su fanatismo por la música electrónica, los pads, consolas y hasta las Ondas de Martenont. Sí, Jonny Greenwood es un músico potente en todos los aspectos y tomarle un poco de atención nos hará entender que su habilidad es monstruosa y fabulosa.

Aunque ya había hecho varias bandas sonoras anteriormente y había lanzado su disco como solista, fue en 2007 cuando trabajó con Paul Thomas Anderson en un proyecto que le dejó varios premios, se trató de la película There Will be Blood, de la cual se encargó de armar la banda sonora.

El resultado fue tétrico y frío en el sentido más positivo. Hizo tracks deliciosos y oscuros con secuencias que hicieron que el filme fuera una maravilla. En este 2018 vuelve a ser importante el nombre de Jonny Greenwood, pues ha vuelto a trabajar con Anderson en su película Phantom Thread.

Por armar la música de este filme ha sido nominado al Globo de Oro y al Óscar, y aunque sus posibilidades no sean muchas, ha creado una banda sonora bellísima, que vale toda la pena escuchar y observar.

Las piezas son exquisitas, deja descansar sus experimentos sonoros y le da pie a la música clásica con elegantes notas y perfectos descansos. Con esta película se comprueba que Jonny se ha aliado aún más fuerte con Anderson y que la dupla continuará armando música para el cine por muchos años más.

Cabe destacar que su increíble proyecto Junun, no sólo incluía un disco producido por Godrich sino todo un documental limpio dirigido por Paul Thomas Anderson. Reitero que hay que tomarnos muchísimo más en serio todo el trabajo que hace este trío, comenzando por la timidez pero brillantez de Jonny Greenwood.

 

@dianaegomez

  • URL copiada al portapapeles