“Horizontes”
Desde los Medios de Comunicación debemos empoderar a la mujer, a través de la utilización de un lenguaje incluyente. Durante años el género femenino ha demostrado que es sumamente capaz de desempeñar múltiples labores a la par que los hombres. Incluso hay caballeros que prefieren trabajar hombro con hombro con mujeres porque éstas son aún más responsables y diligentes que los varones. Hoy día muchas son las mujeres que desempeñan el rol de padre y madre en el seno familiar, son proveedoras de sus retoños y cumplen a cabalidad con las tareas que el destino les deparó.
La mujer conquista terrenos cada vez más amplios y exige de manera consciente un situación de igualdad con el hombre en los ámbitos jurídico, laboral y cultural. El pasado 8 de marzo, conmemoramos el Día Internacional de la Mujer, y debemos seguir pugnando por conquistar la equidad de género y la no discriminación de las mujeres, que aún hay muchas que en pos del amor o por temor, permiten que el hombre las maltrate y prefieren guardar silencio antes que denunciar al agresor; y en éste sentido muchas son las que incluso pierden la vida.
Más que celebrar, debemos reflexionar… La cultura muestra a la mujer como instrumento de placer, objeto de exhibición y reproductora de la especie. Los cambios que deben producirse para lograr la equidad de género requieren tiempo. No hace mucho la mujer no podía votar, no podía acceder a puestos políticos, y ni siquiera podía concebir tener un trabajo remunerado fuera de casa sin previa autorización de su cónyuge.
Por fortuna en México nuestra Constitución faculta a las mujeres para intervenir en la formación y el funcionamiento de los órganos públicos, y reconoce su capacidad política para edificar partidos, debatir asuntos y desempeñar cargos públicos en igualdad de posibilidades. Dicha capacidad se expresa por medio del voto, no importando el lugar donde resida, dentro o fuera de nuestro país.
Por lo anterior, es seguro que la participación de las mujeres será copiosa en la próxima contienda electoral, ya que somos mayoría en el padrón, y nuestro sufragio significa también el reconocimiento a la igualdad en la participación política, el que cada una de nosotras podamos decidir sobre nuestra vida y la posibilidad de que cada vez más mujeres sean electas para estar en cargos de representación política.
En fin que el proceso electoral de julio próximo requiere de la participación y entusiasmo de las mujeres; a últimas fechas muchas nos quejamos por la inseguridad, el incremento en el costo de la vida, los escasos empleos y la mala remuneración salarial; el mal gobierno, por la falta de Estado de Derecho, la corrupción y la impunidad. Ésta es una buena oportunidad para hacer valer nuestros derechos, y que el día de mañana al participar en los comicios podamos demandar a nuestras autoridades el cumplimiento de sus compromisos de campaña, y supervisar y alegar que el país tenga timón y vaya hacia buen puerto. Ahora es nuestra oportunidad, las mujeres somos fuertes, tenemos voz y voto…
