Con expectación los mexicanos vivimos el debate que se efectuó anoche en el Palacio de Minería. Pudimos escuchar las propuestas de los candidatos a la presidencia José Antonio Meade de la Alianza Todos por México, Ricardo Anaya de la Coalición Por México al Frente, Andrés Manuel López Obrador, de la Coalición Juntos Haremos Historia, y de los Independentistas Margarita Zavala y Jaime Rodríguez Calderón. 

Un ejercicio propio de la democracia en que vivimos que tuvo resonancia en Redes Sociales, destacando por puntadas como la de Rodríguez Calderón quien propuso para inhibir la corrupción cortar la mano a quien robe en el servicio público. Fustigó el asistencialismo y rechazó las acusaciones que le han lanzado sobre las firmas que lo mantienen en la boleta. También propuso una policía cibernética, un FBI, que dependa directamente del Presidente.

Por su parte Ricardo Anaya ganador del debate, sugirió inteligencia previa para desmantelar y no sólo detener a las cabezas del crimen. Fue el mas contundente, hizo evidentes algunas contradicciones de López Obrador, quien nunca respondió a tópicos como el papel de Alfonso Romo en el Fobaproa, acusado por el propio AMLO de corrupto en su libro sobre el Fobaproa. Ricardo Anaya iba preparado, se lució cual niño aplicado, y aprovechó la oportunidad de brillar a la hora de hacer réplicas y contrarréplicas. Manifestó que el 1 de julio está en juego el futuro de una generación; ofreció hacer un gobierno honesto y de resultados. 

Andrés Manuel López Obrador dijo que hará la cuarta transformación del país, propuso gobernar con el ejemplo para acabar con la corrupción e impunidad. Se le vio distraído a ratos buscando entre sus papeles, a en ocasiones tenía hombros caídos. Es verdad que el tabasqueño ha tenido oportunidad de hacer campaña desde hace 18 años, de saludar de mano propia a los habitantes de cada municipio de nuestro México. Sin embargo fue sometido a una metralla de preguntas que lo hizo aceptar algunas carreras en contra, hubo momentos en que se veía enojado y en cuanto terminó el debate salió de plano sin decir adiós.

Margarita Zavala planteó mantener la estrategia contra el crimen y eliminar la violencia a través de valores. Exhortó a los ciudadanos a no conformarse con el menos malo, tartamudeaba de repente, y sobresalió por dirigirse a las mujeres y defender en todo momento a su esposo el ex presidente Felipe Calderón. CO

José Antonio Meade, dijo que en los primeros cien días de su gobierno logrará un código penal único. Digamos, fue el más deslucido, destacó sus cualidades personales sobre sus ideas y expresó querer hacer equipo con quienes apuestan al esfuerzo.

Así las cosas, los ciudadanos hemos conocido más sobre las propuestas y temperamento de cada uno de los contendientes a la presidencia de México, y de aquí al primero de julio habremos de tener un mayor criterio para elegir al mejor postor. 

Gobernar como bien sabemos es un arte, porque requiere de inspiración, intuición y oportunismo, También se debe ser coordinado y versátil a la hora de tomar decisiones. Por lo que más nos vale razonar a quién habremos de elegir para tan delicada y fascinante labor.

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