Mirarnos en este espejo incierto de la muerte

Escribí así a la media tarde de este 24 de diciembre de 2018 que quedará marcada como fecha trágica en la historia de Puebla. Su impacto para el derrotero de nuestra vida pública apenas lo avizoramos.

Ahora mismo, ya entrada la noche no hay muchas más palabras. Y sí un territorio inhóspito, ideal para la especulación. Desatados los rumores y las acusaciones, no es fácil evitar caer en ese juego perverso, y cualquiera empieza a urdir tramas viles fundadas en la ignorancia en torno a lo sucedido, y en la fantasía, su compañera.

El hecho, sin más, es el de la confirmación de la muerte por el colapso de la aeronave en la que viajaban Martha Erika Alonso Hidalgo y Rafael Moreno Valle, dos personas sin las que no se explica la historia reciente de Puebla. Esposos y gobernadores. Tengo memoria de lo que he investigado y escrito sobre ellos dos, sé lo que los dos han significado para los procesos políticos y sociales de nuestro estado. Me apena su muerte. Y la lamento también por las repercusiones que tendrá sobre la vida de todos nosotros.

El hecho, sin más, es que lo que sigue es un interinato y nuevas elecciones. Los meses por venir serán los de un vendaval político al que nos arrojan acontecimientos que han desquiciado a las instituciones del poder público y que, ante esta tragedia, se revolverá todavía más con la manifiesta falta de cordura de quienes encabezan las representaciones políticas. Y todo en el marco de la indefensión de la sociedad civil ante el crimen que ha desbordado absolutamente lo que conocemos como procuración de justicia y la más elemental seguridad pública.

Esa es nuestra realidad por venir.

Pero la realidad, ahora mismo, en esta noche del 24 de diciembre, es la que no admite especulación: cinco personas han perdido la vida. Dos personalidades de la vida pública, dos trabajadores de la industria aeronáutica y un asistente de Rafael Moreno Valle. Los cinco con sus sueños y propósitos cortados en una tarde de sol esplendoroso y frío. Descansen en paz.

Más nos vale a todos mirarnos ante este espejo incierto de la muerte

* Director general de www.mundonuestro.mx

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