Reinventarse o morir

  • URL copiada al portapapeles

Uno de los propósitos personales al iniciar el año es querer ser la mejor versión de uno mismo, y eso incluye nuestra forma de vestir. El pensamiento común es que, para lograrlo, siempre hay que invertir una gran cantidad de dinero, siendo que se pueden hacer grandes cambios con pequeñas inversiones. Ya lo dice La Agrado en la película Todo sobre mi madre: “una es más auténtica cuanto más se parece a lo que ha soñado de sí misma”.

Una forma de aplicar estos pequeños cambios está en el uso de accesorios. Puedes comprar un anillo, tal vez un par de collares o pulseras, cambiar el armazón de tus lentes, invertir en unas gafas o en una buena bolsa (no importa si eres hombre o mujer). ¿Quieres algo permanente? Es momento de hacerte ese corte de cabello al cual le tienes miedo, o probar ese tinte o efectos de color que mueres por probar. Si sientes que es momento de un cambio radical, una perforación, piercing o tatuaje son excelentes opciones que deberías considerar.

Si el propósito va en serio, considera acudir con un especialista para que te ayude a descubrir y potencializar tu estilo; seguramente tienes una gran cantidad de ropa que no tienes idea de cómo combinar, o comprando algunas piezas, tendrás más opciones para combinar. La decisión de encontrar cómo mejorar o cómo ser esa “mejor versión de nosotros mismos” está en nuestro poder. Es increíble cómo a veces un corte de cabello, un manicure o comprar un detalle para nosotros mismos, hace la diferencia en nuestro estado de ánimo.

 

  • URL copiada al portapapeles